Si bien suena trillado que debe ganar o ganar, a Gimnasia y Esgrima no le cabe otro término para cortar la caída libre de seis derrotas consecutivas nada más y nada menos que ante Atlético Rafaela en el estadio de la "crema" hoy desde las 16. Rodrigo Rivero será el árbitro.
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Si bien suena trillado que debe ganar o ganar, a Gimnasia y Esgrima no le cabe otro término para cortar la caída libre de seis derrotas consecutivas nada más y nada menos que ante Atlético Rafaela en el estadio de la "crema" hoy desde las 16. Rodrigo Rivero será el árbitro.
Y no puede dejar pasar más puntos, porque increíblemente, pese a dejar en el camino los últimos 18 puntos que disputó, el "lobo" está a siete unidades de entrar al Reducido, un par de triunfos que logre y atendiendo la irregularidad de la competencia, vuelve a entrar en carrera.
Claro que para eso, es fundamental volver a la senda de la victoria, o por lo menos cortar el mal momento para torcer la historia, hacer el borrón y la cuenta nueva de la mano de Marcelo Vázquez que a lo largo de la semana tuvo mucho trabajo.
Las pruebas fueron constantes, aunque el margen de error es menor, pero el DT de Gimnasia y Esgrima se permite evaluar y por ende mete mano en el equipo que viene de caer la fecha pasada en casa en manos de Estudiantes de Buenos Aires.
Y como todo equipo se arma de atrás para adelante, de entrada probará con Sosa en lugar de Chiarini en el arco, siendo una de las variantes más rutilantes, además vuelve Cazula por Juárez, apuesta a Abet por Soria y adelante de la partida irá Miracco por Tevez.
Pero se espera que el funcionamiento sea otro, ya con unos días más de trabajo, la mano del entrenador debería comenzar a visualizarse en cuanto al juego, no caer en lo mismo de los últimos partidos, el desorden y la falta de precisión para jugar las pelotas simples al pie de un compañero.
Al frente estará Atlético de Rafaela que si bien llega de ganarle a Ferro, está en deuda con su público, por lo que esa obligación de salir a ganar tendrá que ser aprovechada por el "lobo".
Se van a abrir los espacios y ahí, de mitad de cancha hacia adelante, Gimnasia deberá acelerar para no ser un equipo predecible y pegar en los momentos justos.
Atrás tendrán que marcar al goleador Claudio Bieler, pero fundamentalmente a los volantes que son los que llegan para abastecer de pelota al delantero.