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Una feroz golpiza habría recibido el conocido rugbier salteño Gerónimo Saravia por parte de personal policial que lo confundió, supuestamente, con un ladrón o delincuente, la noche del viernes. Durante el procedimiento habría recibido una descomunal paliza de un grupo de policías, entre ellos personal de la Brigada de Investigaciones.
Por el hecho, el rugbier fue internado en delicado estado en una clínica privada, según mencionaron las personas que se comunicaron ayer con El Tribuno.
“No sabemos las causas por lo que este hecho no ha tomado estado público. Queremos creer que están esperando la evolución del joven para iniciar los reclamos pertinentes”, dijo la fuente.
El suceso ocurrió en las últimas horas del viernes, cuando Saravia se retiró de una reunión con amigos en el paraje La Isla, cercano a esta capital. De retorno a la ciudad, vio que una camioneta lo seguía de cerca por lo que decidió acelerar. Un poco más adelante -según el relato de las fuentes- el vehículo de Saravia fue interceptado por un VW Polo, del cual se bajaron hombres armados con Itakas. Saravia entró en pánico, puso reversa y chocó su auto con la camioneta que lo seguía por detrás. Mediante una maniobra, logró escapar hasta que vio un móvil del 911. Se detuvo para pedir ayuda y fue en ese momento en que sus perseguidores le dieron alcance y le reventaron el parabrisas, la luneta y comenzaron a golpearlo hasta dejarlo prácticamente inconsciente.
Pero nada de esto habría trascendido de no ser por los carteles y panfletos que aparecieron en la tarde del sábado en cancha del Jockey Club.
En ese lugar, amigos y familiares del reconocido deportista, a modo de protesta, comenzaron con una pegatina de afiches en los que se mostraba el rostro de Saravia completamente desfigurado por los golpes que recibió en el errado operativo. Esto es lo que decían las leyendas que acompañaban a las imágenes. Las fuentes señalaron que, pocos minutos después de que aparecieran los carteles y afiches, estos fueron retirados por desconocidos y que solo quedaron los comentarios y las dudas sobre la situación.
También afirmaron que la limpieza de la pegatina fue ordenada por personas del Gobierno, presentes en la cancha del Jockey Club.
Al inquirir acerca del porqué de la medida de ocultar una protesta por una agresión descalificante, recibieron como respuesta “son órdenes de arriba”, señalando al Ministerio de Seguridad como el responsable de la medida.
“Seguramente quieren tapar el sol con el dedo”, dijo ayer un conocido de la víctima sobre la violencia policial. No hubo desde las oficinas de Prensa de la Policía ninguna mención al tema, que según se cree está cajoneado en el Ministerio de Seguridad. Otra fuente cercana a la repartición policial aseguró que, los próximos días, varios policías podrían ser separados de la fuerza.