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En los pasillos de Central Norte todavía se escuchan ecos de incomprensión y desazón en algunos jugadores, luego de la categórica derrota que sufrió frente a Tiro Federal de Rosario.
Con los ánimos algo caídos pero con la firme convicción de superar el golpe, el plantel azabache volvió ayer a las prácticas pensado en su próximo rival: Unión Sunchales, al que recibirá por la tercera fecha de la reválida el viernes a las 22 en el estadio Padre Martearena.
El amargo sabor que dejó la última goleada fue reflejado en Carlos Fretes, referente del plantel cuervo, quien en diálogo con El Tribuno expresó: “Fue increíble, porque apenas iniciamos el partido estabamos con un penal en contra que inventó el árbitro. Después el equipo intentó buscar el empate hasta que llegó el segundo gol y nos vinimos abajo anímicamente. Después, lo del árbitro es un tema aparte”.
Según el defensor, uno de los factores fundamentales para apuntalar será el diálogo: “Todavía no tuvimos la chance de hablar, entre mis compañeros solo queríamos dejar pasar el momento porque era mucha la impotencia y bronca. Tenemos que recuperarnos sí o sí de este resultado adverso para que el viernes los tres puntos se queden en Salta”, dijo, y agregó: “Tenemos que ganar y después tratar de sumar afuera, que es nuestro karma. De visitante se nos complica y no podemos sacar ni un punto”.
Si bien la mente está puesta en Unión Sunchales, será vital llegar al clásico con Juventud Antoniana (la semana próxima) con el mejor de los ánimos. Acerca del próximo rival, Fretes sostuvo que “Unión viene jugando para no descender en la pelea directa que tiene con Alumni, por eso es un rival de cuidado y nosotros tenemos que ganar para llegar al clásico con oxígeno”, declaró el defensor azabache, quien mira con optimismo el futuro.