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Una mujer denunció ayer en la comisaría de El Mirador, en Rosario de la Frontera, que cuatro de sus sobrinas habían sido abusadas sexualmente por su cuñado, y que el mismo huyó de su domicilio al enterarse que estaba por ser denunciado.
Las menores de 15, 12, 9 y 2 años fueron ayer revisadas por el médico legal de Policía, pero los resultados de las pericias aún no tomaron estado público.
Las niñas se domicilian en el barrio Ramón Abdala de la ciudad termal y, según fuentes de la investigación, estaban siendo sistemáticamente abusadas por su propio padre, cuya filiación no se hizo pública por razones legales.
El padre de las cuatro criaturas se encuentra prófugo, acusado de abuso sexual agravado por el vínculo, cuya causa se tramita en el Juzgado de Instrucción Formal 2 del Distrito Judicial del Sur, a cargo de Mario Dilascio.
El sujeto es intensamente buscado por la policía, incluso desde el lunes falta a su trabajo como obrero municipal.
El hombre, de 36 años, huyó el domingo, cuando la mayor de sus hijas, de 15 años, le contó a su tía de los abusos a los que la sometía a diario su propio padre en ausencia de su progenitora.
La mujer increpó duramente a su cuñado y éste, al interpretar que la denuncia en su contra era inminente, decidió huir del hogar e incluso abandonó su trabajo.
Fuentes policiales aseguraron que el sujeto no se encuentra ya en Rosario de la Frontera, al menos en los lugares que solía frecuentar, pero que su captura es inminente.