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Bernacki le contesta a Foffani

Martes, 22 de octubre de 2013 01:08
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Es una falacia cruel considerar la persona humana como una especie de “tumor” en el cuerpo de la madre.

Con suma tristeza, me enteré por una FM de Salta, acerca de los conceptos vertidos por una candidata, Cristina Foffani, sobre la vida concebida, como una “malformación” en el seno materno: sin lugar a dudas significa una crasa ignorancia sobre antropología básica, genética, sobre la medicina que protege el embrión por lo que significa.

Es una falacia cruel considerar la persona humana como una especie de “tumor” en el cuerpo de la madre. Además, es discriminar a la mujer como tal y a su vocación a la maternidad, cuando estábamos en vísperas de la celebración del día de la Madre. Negar el derecho a la vida, es negar el cimiento de todos los demás derechos.

Catecismo 2270: “La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de su concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida.”

El actual papa Francisco tuvo mucho que ver en su momento con la redacción del documento del Episcopado en Brasil, cito solo algunos párrafos:

Aparecida 468: “Esto subraya la importancia de la lucha por la vida, la dignidad y la integridad de la persona humana.

La defensa fundamental de la dignidad y de estos valores comienza en la familia”.

Aparecida 469: “Apoyar y acompañar pastoralmente y con especial ternura y solidaridad a las mujeres que han decidido no abortar, y acoger con misericordia a aquellas que han abortado, para ayudarlas a sanar sus graves heridas e invitarlas a ser defensoras de la vida.

El aborto hace dos víctimas: por cierto, el niño, pero, también, la madre.”

El respeto y la defensa por la vida concebida, es de derecho natural, y no producto de una profesión de fe como lo quieren presentar determinadas ideologías que al negar la trascendencia del hombre, lo reducen solo a un producto azaroso de la materia.

Tengamos en cuenta los principios que rigen los partidos en el momento de pensar el voto para ser emitido responsablemente.

* Monseñor Dante Bernacki, Vicario General Arquidiócesis de Salta.

 

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