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Arsenal desperdició una buena oportunidad de mantener intacta su ilusión por el título al igualar en su estadio con All Boys, 1 a 1, en el partido jugado bajo una intensa lluvia, que abrió ayer la decimocuarta fecha. El gol de los dirigidos por Alfaro fue obra de Milton Caraglio, a los 24' de la primera parte, mientras que Jonathan Calleri igualó para la visita a los 28' de la etapa final.
Con el empate, All Boys acumula siete partidos sin ganar (tres empates y cuatro derrotas), pero rompió una magra racha de 475 minutos sin convertir, aunque continúa en zona de descenso, con un coeficiente de 1,202, sólo por encima de Argentinos Juniors (1,157) y Olimpo de Bahía Blanca (0,846). El mal estado del campo de juego, a raíz de la persistente lluvia caída en el Gran Buenos Aires, fue determinante para el desarrollo del partido, a pesar de que ambos equipos no se caracterizan por el traslado fluido del balón por el piso.
En un escenario de mucho pelotazo el partido fue cambiante, con un tiempo de predominio para cada equipo. El primero fue para Arsenal, que abrió el marcador después de un centro de Federico Milo desde la izquierda que Caraglio cabeceó al gol.
En la siguiente jugada clara del local, Julio Furch remató de zurda desde afuera del área y la pelota dio en el palo izquierdo de Nicolás Cambiasso. La segunda etapa fue toda de All Boys, que cambió la actitud, se puso en posición ofensiva y neutralizó a Arsenal, que apostó sin suerte sus chances a los contragolpes.
Previo al empate de Calleri, la visita tuvo dos oportunidades claras, después de una definición de Javier Cámpora por arriba de Cristian Campestrini que dio en el travesaño y en el rebote el delantero estrelló otra vez la pelota en el palo, con el arco casi a su disposición. Luego, un centro de Cabrera desde la derecha encontró solo a Calleri, quien definió de cabeza al lado del palo derecho.
El empate de All Boys le puso justicia al resultado final de un partido que, extrañamente, no tuvo amonestados, teniendo en cuenta el último vergonzoso antecedente de Arsenal con Gimnasia de La Plata, donde hubo cinco expulsados.