Varios casos de desatención y diagnósticos desacertados señalaron pacientes respecto del hospital “Melchora Figueroa de Cornejo” de Rosario de la Frontera, pero el detonante fue la muerte de Marta Sanguino (48), quien ingresó al nosocomio el 1 de febrero con un agudo cuadro de dolor de estómago, pero los facultativos la atendían por nervios y gastritis.
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Varios casos de desatención y diagnósticos desacertados señalaron pacientes respecto del hospital “Melchora Figueroa de Cornejo” de Rosario de la Frontera, pero el detonante fue la muerte de Marta Sanguino (48), quien ingresó al nosocomio el 1 de febrero con un agudo cuadro de dolor de estómago, pero los facultativos la atendían por nervios y gastritis.
Los días transcurrieron y la mujer fue empeorando, hasta que el martes 5 tuvo un pico de fiebre que la descompensó. Ante esta situación su esposo pidió al médico de guardia, Eduardo Mamus, que ya la venía atendiendo, que firmara el traslado hacia el hospital San Bernardo de la capital salteña. Según dijo, el profesional se negó aduciendo que eran nervios y que esperaran hasta el día siguiente, pero ante la insistencia del marido la derivaron.
Llegó al hospital San Bernardo en horas de la tarde y el miércoles fue intervenida quirúrgicamente. “Los médicos que la operaron me dijeron que le sacaron 7 litros de pus del estómago, que tenía un grave cuadro de peritonitis, que la infección era muy grande y ya había tomado el hígado, un pulmón y los riñones”, explicó el esposo, Roberto Cabrera.
Con mucha bronca e impotencia esbozó que “en el hospital de Rosario de la Frontera no hicieron nada y por la desidia de los médicos la infección se propagó a todo el cuerpo hasta que la terminó matando a mi mujer”. Cabe mencionar que Marta Sanguino, madre de tres hijos, falleció el domingo 17 de febrero luego de haber estado 12 días en terapia intensiva en Salta.
“Nos dijeron que si a mi mujer la hubiésemos llevado dos o tres días antes posiblemente se la podría haber salvado y no se explican cómo se pudo pasar por alto un hecho de esta envergadura”, expresó el marido.
Por su parte, Marta Maidana de Sanguino, madre de la víctima, entre sollozos manifestó que “pedimos que nos den la historia clínica de mi hija, puesto que le hicieron los análisis correspondientes y no sabemos por qué no salió nada sobre la grave infección que tenía”.
Y agregó: “Por este medio pedimos al Gobierno de la Provincia que tome cartas en el asunto y que los cinco médicos que atendieron a mi hija no sigan más en el hospital, que se realice un sumario administrativo para que no vuelva a pasarle a nadie lo que vivió mi familia”, dijo acongojada la madre.
Marcha en la ciudad
El jueves por la noche un grupo aproximado de 100 personas marchó por las calles del pueblo pidiendo justicia por Marta Sanguino. La misma finalizó su recorrido frente al edificio del hospital “Melchora Figueroa de Cornejo” donde se manifestaron con pancartas y gritos.
“Vamos a continuar con las marchas hasta que se haga justicia”, dijeron los familiares de la víctima.
Al mismo tiempo denunciaron que desde el deceso de Marta hasta la fecha, “no se acercó ningún funcionario para darnos apoyo ni interiorizarse sobre lo que realmente pasó”, expresaron mientras dicen que esperan una respuesta del Ministerio de Salud Pública.
Intervención y abultada deuda
Por estas horas corrió la versión de que el hospital de Rosario de la Frontera iba a ser intervenido dado los numerosos casos de mala praxis que fueron denunciados públicamente. También se supo que el nosocomio tiene una deuda con los médicos de las guardias, intervenciones quirúrgicas y con droguerías que proveen los medicamentos. La misma ascendería a los 800 mil pesos. Con relación a este tema, la intendenta, Rómula Gómez de Montero, manifestó a una radio local que la intervención era un hecho y podría concretarse en los próximos días.
En tal sentido, el gerente del hospital, Emilio Alderete, remarcó a El Tribuno: “desmiento terminantemente el tema de la intervención. Es más, ninguna autoridad del Ministerio de Salud, ni el propio ministro hizo alusión al tema”.
Al mismo tiempo dijo que “un sector de la prensa de Rosario de la Frontera está empecinado con el hospital y en forma deliberada hablan sin fundamento, como por ejemplo que el hospital tiene una deuda de un millón y medio de pesos. Es falso”. En esa línea expresó que “la deuda real es de 800 mil pesos y está relacionada a guardias, intervenciones a pacientes Pami y proveedores de medicamentos”.
En cuanto al Pami explicó que “el hospital recibe mensualmente la suma de $ 245.000 para afrontar los gastos de atención con un padrón superior a los 4.000 afiliados”.
También dijo que “trabajamos arduamente en la parte administrativa para regularizar la deuda y somos optimistas que en los próximos meses la vamos a bajar y cumplir con nuestros prestadores”.