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En la provincia, los comerciantes también quieren tener una Super card, al igual que aquella que los grandes supermercados comenzarán a aplicar, aunque éstos aún no saben cuando ni tampoco de qué modo se llevará adelante la medida que arrancaría en 15 días. Y es que ningún sector quiere quedar afuera. Menos el comercio, que en Salta representa poco más del 89% del total de la actividad económica y es uno de los sectores que genera la mayor cantidad de empleo y le teme cada vez más a un posible enfriamiento generado por la inflación.
Esa tarjeta, a través de la que se evitarán las comisiones bancarias (del 3%) que elevan los costos del consumo, representan una alternativa válida para los grandes supermercados, quienes a su vez, deberán mantener el acuerdo de precios.
Por eso, los comerciantes no ven imposible el mismo procedimiento aplicado a su sector. “Es muy importante que se abra la propuesta para los comercios pymes ya que también pagan las altas comisiones y diferentes costos asociados a las operaciones con tarjetas”, explicó Nahuel Hyon, presidente de la Cámara de Pequeños y Medianos Empresarios de Salta. Desde el sector de comercio consideran que fueron excluidas de la Supercard que el secretario del Interior, Guillermo Moreno, piensa emitir a fines de este mes. La Cámara de Comercio e Industria de la Provincia de Salta participará (junto con las demás cámaras del país) este miércoles de una reunión en Buenos Aires, donde solicitarán que la Supercard (o un sistema similar) se extienda para las pymes y la posibilidad de que se disminuyan las alícuotas que las tarjetas de crédito le cobran a los comerciantes grandes, medianos y pequeños. Daniel Betzel, presidente de esa institución informó que “los comerciantes no queremos quedar fuera del acuerdo en intentaremos reactivarnos también con el mismo método”, dijo a El Tribuno.
Los supermercados
En Salta desde los principales supermercados explicaron que no recibieron aún información sobre la fecha en la que comenzará a regir la nueva modalidad de la Supercard, ni tampoco la metodología de su implementación. No obstante la falta de claridad, desde la Subsecretaría de Defensa del Consumidor de la Nación, ya informaron que serán las mismas cadenas de supermercados las que otorguen la tarjeta (que puede ser la misma que cada empresa tiene actualmente). El límite de compra será de $3.000 y $1.000 de crédito. Solo con el recibo de sueldo, y con una factura de servicios se podrá obtenerla. Se pondría en marcha en 15 días. Dos cosas intentaron dejar en claro: el interés anual será del 22% frente al 60% que actualmente se paga, y los fondos para el financiamiento provendrán las empresas aseguradoras.
Estrategia de posicionamiento
Durante los últimos 10 años, la cantidad de supermercados en la Provincia creció considerablemente, y casi todas las cadenas están presentes.
En abril del 2012, lograron recaudar un total de 151 millones de pesos, según el Observatorio de la Cámara de Comercio e Industria de Salta.
“Venimos visualizando la apertura en los últimos años de supermercados que se ubican en diferentes zonas en la capital e incluso en las localidades del interior de la provincia, con una fuerte estrategia de posicionamiento”, explicó a este medio, Nahuel Hyon, presidente de la Cámara de Pequeñas y Medianas Empresas de Salta.
“De 16 sucursales instaladas pasaron a agregarse otras 22 con una venta promedio mensual superior a los $7 millones, esto sin contar la reciente apertura de una cadena de minimercados que prevén abrir 14 puntos de venta”, marcó Hyon.
En Salta, los productos de almacén representan el mayor porcentaje de las ventas en los supermercados, luego carne y artículos de limpieza.
Más dudas que generan confusión
La subsecretaria de Defensa del Consumidor de la Nación, María Lucía Colombo, afirmó que la Supercard entró en vigencia, pero desconoce su aplicación. La funcionaria sostuvo que con esta tarjeta, mediante la que se podrá comprar en los supermercados “ya esta en vigencia porque se enmarca en la extensión del congelamiento de precios en 60 días”. No obstante, una de las ideólogas del proyecto, junto con Guillermo Moreno, admitió desconocer detalles de la aplicación de la medida lanzada. En realidad, Colombo está en sintonía con la mayoría de los supermercados que no se encuentran interiorizados tanto como para lanzar la medida.
Pero además, para agregar más confusión, dijo no saber sí es que las tarjetas que algunos supermercados otorgan podrán seguir funcionando. “No sé, pero estimó que podrían coexistir”, expresó cuando fue consultada en un reportaje en Radio 10. Cuando el periodista le consultó sobre los requisitos que necesitan los consumidores para poder adquirirla dijo: “Tampoco sé”. Y luego señaló que será como se obtiene cualquier tarjeta, con recibo de sueldo y factura de servicio.
Admitió que se formará una sociedad privada que administrará la Supercard.
Lo cierto es como Colombo, ni los supermercados y tampoco los consumidores cuenta con información explícita sobre cómo será la metodología de la tarjeta. Cuando la iniciativa sea publicada en el Boletín Oficial de la Nación, tal vez, aparezcan rasgos más detallados del programa que generará un problema entre los bancos y el Gobierno.