A raíz del salto constante que pega el dólar, las expectativas económicas de los argentinos son negativas. La inflación que el público espera para los próximos doce meses a nivel nacional se ubica, en promedio, en 34,2 por ciento, según un sondeo difundido ayer por la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT), lo que implica una suba de 0,7 punto porcentual comparado con la medición de marzo, pese a la vigencia del congelamiento de precios. A su vez, el presidente del Comité de Certificaciones Internacionales del Instituto Argentino Ejecutivos de Finanzas (Iaef), Douglas Elespe, atribuyó en parte la suba en el valor del dólar paralelo (que en el miércoles tocó los 8,70 pesos y ayer cerró con una leve baja de cinco centavos) a la “desconfianza” que genera la cuestión inflacionaria. El gobierno extendió hasta el 1 de junio el congelamiento de precios -previsto originalmente por dos meses- y anunció la demorada tarjeta Supercard, pero las expectativas inflacionarias de la gente no se moderaron, en línea con mediciones privadas que reflejan subas de precios en la canasta alimentaria.
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A raíz del salto constante que pega el dólar, las expectativas económicas de los argentinos son negativas. La inflación que el público espera para los próximos doce meses a nivel nacional se ubica, en promedio, en 34,2 por ciento, según un sondeo difundido ayer por la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT), lo que implica una suba de 0,7 punto porcentual comparado con la medición de marzo, pese a la vigencia del congelamiento de precios. A su vez, el presidente del Comité de Certificaciones Internacionales del Instituto Argentino Ejecutivos de Finanzas (Iaef), Douglas Elespe, atribuyó en parte la suba en el valor del dólar paralelo (que en el miércoles tocó los 8,70 pesos y ayer cerró con una leve baja de cinco centavos) a la “desconfianza” que genera la cuestión inflacionaria. El gobierno extendió hasta el 1 de junio el congelamiento de precios -previsto originalmente por dos meses- y anunció la demorada tarjeta Supercard, pero las expectativas inflacionarias de la gente no se moderaron, en línea con mediciones privadas que reflejan subas de precios en la canasta alimentaria.
El sondeo de la Utdt arrojó que las expectativas inflacionarias para doce meses a nivel nacional, en promedio, se ubican en abril en 34,2 por ciento, lo que significa un aumento por segundo mes consecutivo.
El director del Centro de Investigación en Finanzas de la Utdt, Guido Sandleris, señaló que “las expectativas de inflación presentaron variaciones muy significativas en la Capital Federal, donde aumentaron 6,3 puntos porcentuales”, al ubicarse en 34,1 por ciento. En el interior del país, alcanzaron a 33,5 por ciento, lo que implica un leve ascenso de 0,4 puntos. En cambio, la estimación inflacionaria para los próximos doce meses en el Gran Buenos Aires, para el promedio, se ubicó en 34,6 por ciento con lo cual verificó un descenso de 0,7 puntos. Sandleris también remarcó que las expectativas inflacionarias aumentaron tanto para la gente de menores recursos, como para el sector de mayor poder adquisitivo, al trepar 1,1 punto y 1,3 puntos, respectivamente. Por su parte, Elespe vinculó la suba del dólar paralelo a la “desconfianza” por la inflación, entre otros factores. Consultado sobre el salto a $8,70 que alcanzó el dólar blue el miércoles, el analista explicó: “motivos institucionales y macro, entre ellos la inflación o la situación fiscal, genera desconfianza”.
“La gente cuida sus ahorros y los protege de la forma que puede. Hay un halo de desconfianza en este momento, hay indicadores que permiten suponer que no es una desconfianza subjetiva, básicamente los indicadores que comenté pero también algún deterioro en el saldo comercial”, planteó.