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Un niño recibió un disparo en la cabeza durante una pelea entre grupos antagónicos, el viernes a la noche. Alertado por vecinos, una patrulla policial se desplazó hasta la esquina de Pueyrredón y Luis Burela donde los efectivos se entrevistaron con un hombre de 52 años, quien en estado de nervios expresó que se había detenido con su esposa e hijo en una almacén, y de improvisto dos grupos de jóvenes comenzaron a pelearse. Uno de ellos sacó un arma y comenzó a realizar disparos y uno de los proyectiles rozó la cabeza del niño de 8 años. Dijo que logró atrapar al agresor, pero este se zafó quitándose la remera y huyó con el arma, dejando abandonada la moto en la que se desplazaba. El niño fue trasladado con la colaboración de vecinos al hospital local, donde le diagnosticaron "herida lineal en cuero cabelludo", sin afectación de órganos vitales. Más tarde la Policía apresó al prófugo, pero ya no tenía en su poder el arma de fuego.