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Olga Baraona Oporto, la mujer que no sabe dónde están sus hijos desde hace dos años, busca otra estrategia judicial.
La mujer, que tiene 23 años y es boliviana, acusa a la Justicia de Orán de haberle quitado a dos de sus niños, de seis y cuatro años, en 2013. Ahora buscará la ciudadanía argentina para reiniciar la causa, que está en el juzgado de familia de Orán, a cargo del magistrado Marcelo Albeza.
"Lo que haremos es presentar un expediente paralelo para investigar las partidas de nacimiento reales de los niños. La estrategia legal está en manos del abogado Santiago Savoy", dijo Patricia Pistán Varela, trabajadora social del Foro de Mujeres por la Igualdad, organización que apoya a la madre en su reclamo.
Como Olga no tenía ni los documentos de ciudadana boliviana, todo el proceso legal se hizo sin su participación.
El juez Albeza consideró que el caso de Olga está "terminado por abandono". El magistrado había decidido enviar a los dos niños a la Casa Cuna de Salta capital en 2013, tras una denuncia por "maltrato" que hizo la abuela de los chicos.
Luego de un año sin que Olga visitara a sus hijos, el magistrado dictaminó la "adoptabilidad" en 2014. Pero la madre sostiene que no veía a los niños porque le resultaba económicamente imposible viajar a Salta.
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Ella formó su familia con José Tordolla, con quien trabaja en las fincas de verduras del norte de Orán. Ahora que recibió la ayuda de la ONG reanudará la búsqueda de sus hijos.
La mujer viajó en la primera semana de mayo a Salta para realizar un acampe en la plaza 9 de Julio y hacer visible su reclamo.
Estuvo ahí una semana y se reunió con miembros del Ministerio de Derechos Humanos, pero dice que solo consiguió una orientación procesal.
La jefa del programa de Violencia Familiar de la Provincia, Betina Gómez, aseguró que existe una denuncia en la comisaría primera por violencia de género en contra de su marido.
"Yo tengo la denuncia contra su esposo por haber golpeado a Olga cuando estaban en la plaza. Por eso se volvieron para Orán", dijo Gómez.
Consultada por El Tribuno, Patricia Pistán Varela aseguró que no hubo denuncia ni golpes. "Olga sufrió una crisis de nervios porque vio que sería difícil averiguar dónde están sus hijos. Por eso decidimos volver a Orán", dijo.
“En la provincia se hace al revés”
“La mayoría de los magistrados de la provincia son minoristas”, aseguró Natalia Buira. La defensora oficial se refiere a que aplican la norma de 1918 de “patronato de la infancia”, y no la nueva Ley 26.061, que asegura protección a niños, niñas y adolescentes.
Dijo que los jueces no pueden quitarles los hijos a sus padres. En Salta es la Secretaría de Igualdad de Oportunidades la encargada de evaluar la situación para que luego la Justicia dictamine qué sucederá. En el caso de Olga se hizo al revés.
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