Emotivo homenaje a Miguel Ragone en el dique Cabra Corral

"Nosotros no estamos seguros que esté en las aguas de este dique, es por eso que seguiremos buscando el cuerpo de Miguel Ragone", dijo ayer Fernando Pequeño con ese intenso dolor que nunca se irá. Las palabras fueron pronunciadas en el dique Cabra Corral, donde una plaqueta recuerda a su abuelo, el exgobernador de Salta desaparecido días antes del golpe cívico militar de 1976.
"Aún hay muchos en el Partido Justicialista que si lo podrían hacer, volverían a matarlo a mi abuelo", continuó Pequeño.
El acto de ayer fue en realidad una ceremonia íntima de los familiares del médico que fue secuestrado y asesinado por las fuerzas policiales salteñas.
Al menos diez integrantes de la familia se reunieron, a las 11, en un local gastronómico, al costado del puente. Allí colocaron una ofrenda floral a la placa donde se lo recuerda y cada uno de los presentes dijo algo, en todos los casos fueron palabras muy emotivas.
Estuvo ausente Clotilde, "la grande", como le dicen a la viuda, a la esposa de Miguel Ragone. "Ella ya tiene 94 años y está saliendo de un ACV. Entonces poco escucha y entiende, es por eso que no la queríamos arriesgar para estos recordatorios", dijo Clotilde, "la hija".
Fue ella misma la que le dijo a El Tribuno que el recuerdo de su papá se vuelve más fuerte en estos años. "Yo le tengo que agradecer a las autoridades municipales de Cerrillos, al gobernador de la Provincia y a los grupos de organizaciones sociales y de derechos humanos porque mi papá sigue cada vez más presente en todos", concluyó. Sucede que el 2016 es un año especial para los familiares de detenidos y desaparecidos antes y durante la última dictadura cívico militar que sacudió a la Argentina. Son 40 años del golpe, como así también de la desaparición de Ragone y de la masacre de Palomitas.
El secuestro del exmandatario fue la primera noticia impactante en Salta acerca de los "trabajos" que comenzaban a realizar los grupos parapoliciales.
Eso, pese a que Eduardo Fronda ya había sido secuestrado, torturado y acribillado en San Lorenzo en enero de ese año. Luego al periodista Luciano Jaime lo dinamitaron en febrero por el hecho de investigar el atroz crimen de Fronda. Así comenzaron a suceder los crímenes de la denominada Triple A. "Fue una acción deliberada para comenzar a sembrar pánico entre la población. Porque los militares le echaban la culpa a los subversivos; estaban preparando el camino para el golpe de Estado del 1976", dijo en una reflexión días atrás Elia Fernández, que era sobrina nieta de don Miguel, y que por esos tiempos tenía ocho años.
La misma edad tenía Fernando cuando a su abuelo se lo llevaron. "Era la figura del padre que yo tenía en el hogar, porque en realidad mi papá tenía 17 años y trabajaba todo el día en el campo. Él era la figura de la verdad y yo le rescato por siempre el valor que le daba a la palabra", dijo Pequeño.
Como una paradoja de los caprichos del destino, ayer estaba Aranzazú, una bella nena de ocho años que es la bisnieta de Miguel Ragone. Con una flor en la mano, dijo: "Estoy feliz de poder estar acá", y en lo más profundo agradeció a su familia por estar con ella. Luego cada uno tomó una flor y caminaron hacia el puente. Allí dijeron más palabras y arrojaron las flores al agua.