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Vecinos de distintos barrios de la capital salteña participaron ayer del homenaje a Roberto Romero, al cumplirse 30 años de su muerte.
Recordaron cuando el exgobernador solía visitar los barrios para conversar con ellos, en esas incursiones siempre les preguntaba cómo estaban. Además -dijeron- compartía mates con ellos, en sus casas.
María Barrios es una vecina de la zona oeste y miembro de la fundación Milenium que ayuda a adultos mayores. La mujer contó que guarda un recuerdo muy grato de Roberto Romero, ya que su madre trabajaba con él en el ámbito social. "Le tenemos mucho cariño porque él ha trabajado mucho en la zona oeste, en la periferia, en los lugares más vulnerables. Él no tenía dramas en llegar y tomar un jarro de mate en cualquier parte. Si tenía que sentarse en el suelo o estar bajo un árbol para oír los problemas de los vecinos, lo hacía", relató.
Añadió que lo recuerdan como un hombre comprensivo que siempre supo escuchar a la gente humilde.
Raúl Santos Puca, otro vecino, del barrio Finca Independencia en la zona sudeste, llegó a la planta editorial del diario El Tribuno con un cuadro con la imagen de don Roberto.
"Todos los años vengo con mi cuadro de don Roberto, padre de todos los salteños. Ahora vengo con mis nietos", contó. Expresó que durante su gobierno "había trabajo para todo el mundo: educación, obras, salud. No vamos a volver a tener un gobernador jamás como el que encabezó Romero".
Y agregó: "El Norte Grande fue lo mejor que hizo para todos. Él era un dirigente que siempre ponía la cara ante todo, no como muchos que hoy se esconden".
Otros actores
En tanto, senadores, diputados y referentes de otros sectores, quienes también asistieron al homenaje, recordaron la figura de Roberto.
"Cualquier palabra queda chica para explicar lo valioso que fue. Siempre le dio soluciones a los que menos tenían", expresó Rodolfo Serrano presidente de la Fundación Azul.