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No son pocos los que creen que con su llegada al gabinete de Javier Milei se cancela, o al menos se postergará por tiempo indeterminado, la idea de dolarizar la economía argentina. Luis Caputo está lejos de ser un economista teórico. Es un especialista en finanzas con experiencia y práctica en Nueva York y con un trascendente paso por el gobierno de Mauricio Macri.
Todos coinciden en su amplia experiencia en las finanzas y por eso mismo fue elegido para el desafío inmediato del nuevo gobierno: deberá enfrentar desde el 10 de diciembre, además de vencimientos con el FMI por cerca de US$ 1.800 millones, una renegociación con el organismo por el desembolso de US$ 3.300 millones debido a que el acuerdo vigente se encuentra "caído". Además, hay un pago a bonistas previsto para enero, en un contexto en el que el BCRA tiene reservas netas negativas en US$ 10.000 millones.
En la gestión pública
Su paso por la gestión pública fue en la administración de Cambiemos.
El 10 de diciembre de 2015 Caputo asumió como secretario de Finanzas en el primer gabinete de Macri. Luego fue el impulsor de la división de las áreas de la cartera económica, que quedó organizada en dos ministerios: uno de Hacienda y otro de Finanzas. Caputo comandó el regreso del país a los mercados internacionales y aseguró el financiamiento externo para un gobierno que arrancaba enfrentando un default heredado de Cristina Kirchner. Junto con su amigo y entonces ministro Alfonso Prat-Gay, Caputo fue una de las piezas clave en la negociación de la Argentina con los fondos buitre.
Los buenos resultados alcanzados en el frente financiero internacional lo llevaron a Macri a promover un primer ascenso dentro del gabinete nacional, cuando en 2016 la Secretaría de Finanzas fue transformada en un ministerio. Desde el nuevo cargo, el financista siguió asumiendo la tarea de asegurar la llegada de los fondos necesarios para hacer frente al déficit fiscal. En su círculo íntimo destacan su capacidad de trabajo y su profundo conocimiento de las finanzas internacionales, así como su vínculo directo con interlocutores en Wall Street.
Luis Caputo, hincha de River y padre de seis hijos, es el primo de Nicky Caputo (exsocio y amigo más cercano de Macri), asumió posteriormente como presidente del Banco Central en mayo de 2018, cargo en el que estuvo hasta septiembre de 2018. "Dato clave: en ese período las Lebac (hoy Leliq) se redujeron en un 30%. Canjeó esos títulos por deuda del Tesoro", escribió en X el economista Ivan Carrino.
En el medio, debió afrontar conflictos que trascendieron el mundo de las finanzas. El nombre de Luis Caputo fue uno de los que apareció mencionado en el caso de los Paradise Papers. Por estas denuncias, el futuro ministro tuvo que presentarse en el Congreso para dar explicaciones sobre su vínculo con empresas offshore que no habían sido incluidas en su declaración jurada. La sesión se terminó levantando en medio de un escándalo.
La gestión en la entidad monetaria terminó rápidamente, pero en su paso tuvo tiempo para tener un fuerte enfrentamiento con Christine Lagarde y el equipo técnico que acompañaba a la entonces directora del Fondo Monetario Internacional.
El CV de este licenciado en Economía de la UBA y profesor de Economía y Finanzas de la UCA incluye un paso por el banco JP Morgan como jefe de Trading para América Latina entre 1994 y 1998, y un posterior ingresó al Deutsche Bank, donde llegó a presidir la sede argentina. En el sector privado también condujo la administradora de fondos comunes de inversión Axix y fue director de Edenor. Actualmente tiene la consultora Anker, que comparte con Santiago Bausili. Esta semana trascendió que cerraba la consultora y sumaba a sus socios al equipo del Ministerio.
Caputo está casado con Ximena Ruiz Hanglin -sobrina del conductor de radio- y tiene seis hijos, con edades que van desde los 16 hasta los 29 años.