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Otros tres puntos sumó Gimnasia y Tiro frente a Sol de América de Formosa, con la victoria de ayer por 1 a 0, con gol convertido por Daniel "Bomba" Carrasco en el Gigante del Norte, que lo mantiene y consolida como solitario líder en la zona D del Federal A, con 38 puntos y estiró a 7 de ventaja sobre su inmediato perseguidor, Sarmiento de Resistencia, que reúne 31 unidades.
Pero el albo que dirige el "Yagui" Rubén Forestello la tuvo que remar bastante en el partido contra los formoseños que le plantearon el juego como conociendo cada movimiento estratégico, y así frenó esas claras intenciones de desenvolver un trabajo efectivo que le hubiera permitido llegar con posibilidades de marcar en el arco defendido por Eduardo Garcete.
Sol de América paró a sus hombres en función de imponer presencia en la mitad de la cancha y quitarle los espacios para que Walter Busse o Exequiel Narese pudieran efectuar descargas precisas. Entonces, para romper el cerco defensivo de la visita hasta Rubén Villarreal buscó sumarse por sorpresa, pero daba la impresión de que el funcionamiento colectivo carecía de ese ingenio ofensivo y que aparecía un vacío para burlar el sistema de contención que el rival propuso y que se encontraba bien cimentado.
Una que otras incursiones desde ambos bandos inquietaron a los arqueros y el que mostró un par de dudas fue Federico Abadía, quien en un primer momento tuvo que recurrir en dos tiempos para evitar la caída de su arco, en un mal cálculo aéreo; en otra intervención el "uno" también fallo en la salida y ningún adversario pudo aprovechar de cabeza para cambiar la trayectoria del tiro de esquina.
En seguida nomás, Walter Busse, en campo contrario y cerca de uno de los vértices del área grande, no pudo controlar la pelota y un compañero encontró mejor ubicado a Daniel Carrasco, quien ensayó el remate de media distancia y le puso lejos del alcance de Garcete. Un lindo gol y una diferencia que se requería para encarar de otra forma el trámite del encuentro.
Los hombres visitantes sintieron el impacto. Y Exequiel Narese tuvo que dejar la cancha por una lesión, ingresó en su lugar Adrián Toloza, quien no desentonó con un desempeño acorde a las exigencias por cómo se estaba jugando y ante un duro adversario.
Se adelantó unos metros el conjunto de Marcelo Bonetto y allí salió a relucir la firmeza defensiva que exhibe Gimnasia y Tiro en cada presentación, desde el inicio del torneo, porque la línea de cinco cuando tiene que defender ofrece las garantías necesarias de seguridad. En la línea de ataque el Pollo Rojas, quien no da por perdido ningún balón, estaba atento para algunas contras y creció la propuesta para que en cada avance en un arco o en el otro el gol empiece a rondar.
Pero, luego Gimnasia evidenció un quedo. Sol de América sufrió la expulsión del central Julio López y Bonetto tuvo que ejecutar variantes para disponer de un equipo con nuevo dibujo con un jugador menos.
Fue el instante que Gimnasia y Tiro podría haber ejercido un control más acertado. De asegurar el triunfo final con otro gol, pero Sol de América, pesar de la inferioridad numérica, puso todo el empeño para acercarse hasta Abadía, quien respondió al pedido de mantener su arco en cero.
En tiempo de descuento, Ezequiel Neira casi paraliza el Gigante del Norte, pero el envió del defensor fue controlado por Abadía. No hubo más tiempo, sino de los abrazos y el festejo albo por el triunfo.