El Juzgado de Garantías N° 2 elevó a juicio una causa (de la tantas que se tramitan en la Justicia) contra Sergio Ramos, actual intendente de Rosario de Lerma, por un hecho de peculado que se remonta al año 2013.
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El Juzgado de Garantías N° 2 elevó a juicio una causa (de la tantas que se tramitan en la Justicia) contra Sergio Ramos, actual intendente de Rosario de Lerma, por un hecho de peculado que se remonta al año 2013.
Las denuncias, presentadas en 2017, se relacionan con fondos destinados a viviendas populares durante la gestión del entonces intendente Ignacio Jarsún.
Según el rigor de los trámites judiciales, la fecha de audiencias se establecerá pronto al no quedar trámites pendientes, y por otro lado, el intendente ya no goza de fuero, como los tuvo durante cuatro años por haber sido senador provincial.
Por lo tanto, se fijará una fecha según la disponibilidad de los tribunales, que podría ser en 30 o 40 días, dependiendo del número de juicios pendientes. Se realizará un sorteo para determinar qué cámara y qué tribunal se encargará del caso.
Sergio Omar Ramos afrontará la acusación exclusivamente contra él, aunque esto podría variar según los testimonios que surjan durante el juicio.
No se espera que el proceso dure tanto como el del exintendente de Campo Quijano, Manuel Cornejo, quien terminó condenado con prisión efectiva por seis años. Si Ramos fuese condenado, podría apelar. Mientras la condena no sea firme, puede continuar en su cargo de intendente. Sin embargo, con una condena penal, su situación no será cómoda y habrá que ver las posibles derivaciones que podría tener en el Gobierno provincial. Legalmente, el actual intendente de Rosario de Lerma, en caso de ser encontrado culpable por hechos de corrupción, aún tiene el derecho a una apelación más. Pero políticamente, y ante la opinión pública, cuando el gobierno de Gustavo Sáenz se proclama por la ficha limpia, este caso resulta una situación incómoda para un Gobierno comprometido con el cumplimiento de la ley.
Rosario de Lerma ya fue intervenido hace años por razones similares y bajo la intendencia del mismo Sergio Ramos. Lamentablemente tiende a repetirse la historia política frente al juicio confirmado.
La primera de tantas
Sergio "Topo" Ramos cuenta con un triste historial de procesos judiciales en su contra, derivados de sus gestiones como intendente de Rosario de Lerma. Enfrenta acusaciones graves. Una de estas acusaciones lo llevó a prisión después de que la municipalidad fuera intervenida en el año 2.001.
La causa por la que irá a juicio se remonta al año 2013, durante su mandato como intendente, y se le acusa de peculado por desviar más de $340,000 pesos, fondos provinciales destinados a la construcción de viviendas. El Ministerio Público Fiscal informó que estos fondos se transfirieron como parte de un Proyecto de Empresa Social para la construcción de casas prefabricadas. Sin embargo, la Unidad de Delitos Económicos Complejos descubrió que la construcción nunca se llevó a cabo. En el sitio designado para la obra no se encontraron indicios de su realización, y tampoco se pudo verificar que se hubiera realizado en otro lugar.
Una camioneta
En mayo del año pasado, la fiscal Ana Inés Salinas Odorisio de la Unidad de Delitos Económicos Complejos solicitó un juicio para Sergio Omar Ramos, acusado de peculado de bienes, y para Natalia del Valle Guerra, como cómplice necesaria del mismo delito. La investigación comenzó el 13 de febrero del 2023, tras un incidente vehicular involucrando a una concejal y un vehículo de la Cámara de Senadores de Salta. El 20 de abril, Ramos y Guerra fueron llamados a declarar; sin embargo, solo Guerra fue imputada debido a la ausencia de Ramos. Este último negó los cargos en una audiencia posterior de el 26 de abril. La fiscal concluyó que Ramos desvió un vehículo oficial, una Chevrolet S10, para uso personal de Guerra, afectando así los recursos y operaciones de la Administración Pública. Ramos fue intendente de Rosario de Lerma desde 1995 hasta 2015 y senador provincial en el período 2017-2021. Fue reelecto y renunció en 2023 para asumir como intendente.
Otra causa que podría terminar de igual forma
En 2019, se dio a conocer otro caso aún no llevado a juicio. El centro de convenciones, una obra inconclusa y objeto de múltiples denuncias, sigue siendo un símbolo de impunidad. Situado en el complejo municipal de Rosario de Lerma, se concibió como un espacio multicultural para actividades académicas y culturales.
En septiembre de 2014, se anunció que la construcción estaba en el 40%, pero ni siquiera se completó el salón de 450 m2 con escenario, paneles acústicos, ni vestuarios. Ignacio Jarsún, al asumir como intendente en 2015, denunció estas irregularidades ya que la obra se dio como concluida con un gasto de 3.8 millones de pesos.