La institución más antigua del fútbol salteño, el Club Atlético Libertad, atraviesa un delicado presente que lo pone al borde de su desaparición.
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La institución más antigua del fútbol salteño, el Club Atlético Libertad, atraviesa un delicado presente que lo pone al borde de su desaparición.
Como vino ocurriendo hace tiempo, las obligaciones de la institución es el tema que más preocupa.
Libertad deberá afrontar un nuevo embargo por la suma de $89.867, por una deuda con la empresa Aguas de Salta y, si en pocos días no reúne el dinero, la institución debería ser rematada.
Por tal motivo, algunos socios de la institución decana presentaron varios pedidos para que el Gobierno intervenga y solucione esta problemática, al entender que hay un “mal manejo del club” por parte del actual presidente, Héctor Assef.
“Hace quince años que el actual presidente está a cargo del club, solo se dedicó a vender los bienes aduciendo que eran para pagar las deudas pero en ningún papel dice que haya cancelado el pasivo de la institución”, comentó Darío Cedrón, uno de los socios de Libertad.
“Este señor (por Assef) tiene dos causas penales por administración fraudulenta, pero la Justicia no hace nada, mientras él sigue vendiendo el patrimonio de la institución”, remarcó Cedrón.
La cédula de remate fue notificada el seis del corriente mes por la jueza Beatriz Del Olmo de Perdiguero con el expediente N§ 293.710/10 por el Juzgado de 1ª Instancia, en la cual se intima a pagar la deuda con Aguas de Salta en los diez días hábiles de notificado.
El club decano, que ya se desprendió de varios bienes, está en la cuerda floja nuevamente por las deudas y sus instalaciones corren un serio peligro de ser rematadas. Una lástima.