En La Candelaria buscan impulsar la producción de ají mediante la industrialización del proceso de molienda a partir de la instalación de un molino, lo que otorgará valor agregado a la producción local.
En estos días comenzará el acondicionamiento de la planta, que entraría en funcionamiento en febrero próximo. El molino estará ubicado en el centro del pueblo.
La iniciativa, llevada adelante por la comuna local, busca frenar el creciente abandono de la producción de ají registrado en los últimos años. La causa: las pocas perspectivas comerciales del producto y los costos.
Para los productores dedicarse al ají ya no es tan rentable. “Actualmente se comercializa el ají en vaina, a granel o en bolsa. Con el molino se hará más rentable la producción, porque se lo podrá vender fraccionado”, señaló la ingeniera Aidé Lackner de Bibilone, del INTA de Rosario de la Frontera, quien se encarga del asesoramiento.
El proyecto pretende abarcar todas las etapas de producción del ají molido, como la recepción de la materia prima, lavado, secado, ahumado, tostado, molienda, envasado y etiquetado en la planta.
Los fondos para la compra del molino, un tractor y el acondicionamiento del galpón para almacenar la producción ascienden a $500 mil y se consiguieron a través de la línea de crédito para entramados productivos locales, del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
En este caso, el municipio presentó el proyecto destinado a brindar servicios y asesoramiento a los productores de la zona.
Producción artesanal
La etapa de la molienda es la más compleja del proceso. El proyecto beneficiará a más de 40 productores y otorgará valor agregado a la producción de ají, que actualmente se realiza en La Candelaria de manera artesanal.
El proceso consiste en el secado de los ajíes exponiéndolos al sol. Luego se los trata con humo en piezas acondicionadas.
En la zona se produce la variedad colorado y cayenne. Cada productor trabaja en promedio una hectárea.
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En La Candelaria buscan impulsar la producción de ají mediante la industrialización del proceso de molienda a partir de la instalación de un molino, lo que otorgará valor agregado a la producción local.
En estos días comenzará el acondicionamiento de la planta, que entraría en funcionamiento en febrero próximo. El molino estará ubicado en el centro del pueblo.
La iniciativa, llevada adelante por la comuna local, busca frenar el creciente abandono de la producción de ají registrado en los últimos años. La causa: las pocas perspectivas comerciales del producto y los costos.
Para los productores dedicarse al ají ya no es tan rentable. “Actualmente se comercializa el ají en vaina, a granel o en bolsa. Con el molino se hará más rentable la producción, porque se lo podrá vender fraccionado”, señaló la ingeniera Aidé Lackner de Bibilone, del INTA de Rosario de la Frontera, quien se encarga del asesoramiento.
El proyecto pretende abarcar todas las etapas de producción del ají molido, como la recepción de la materia prima, lavado, secado, ahumado, tostado, molienda, envasado y etiquetado en la planta.
Los fondos para la compra del molino, un tractor y el acondicionamiento del galpón para almacenar la producción ascienden a $500 mil y se consiguieron a través de la línea de crédito para entramados productivos locales, del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
En este caso, el municipio presentó el proyecto destinado a brindar servicios y asesoramiento a los productores de la zona.
Producción artesanal
La etapa de la molienda es la más compleja del proceso. El proyecto beneficiará a más de 40 productores y otorgará valor agregado a la producción de ají, que actualmente se realiza en La Candelaria de manera artesanal.
El proceso consiste en el secado de los ajíes exponiéndolos al sol. Luego se los trata con humo en piezas acondicionadas.
En la zona se produce la variedad colorado y cayenne. Cada productor trabaja en promedio una hectárea.