Terminó el juicio por el crimen de Maximiliano Zapana (22), el joven asesinado tras recibir una puñalada en el cuello y desangrarse el 10 de mayo de 2011, a la salida del boliche bailable S"kombros. Ayer, Diego Armando “Tarti” ó “Tartancho” Terán (20), fue condenado por la Cámara Tercera en lo Criminal, a 15 años de prisión efectiva por resultar autor material y penalmente responsable del delito de homicidio simple, agravado por la participación de un menor, en concurso real con robo simple. En tanto, Alfredo Gonzalo Aguirre (27) alias “Negro” ó “Tatín” recibió la pena de 13 años de prisión efectiva por resultar partícipe necesario. Ambos cumplirán su condena en el penal de villa Las Rosas.
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Terminó el juicio por el crimen de Maximiliano Zapana (22), el joven asesinado tras recibir una puñalada en el cuello y desangrarse el 10 de mayo de 2011, a la salida del boliche bailable S"kombros. Ayer, Diego Armando “Tarti” ó “Tartancho” Terán (20), fue condenado por la Cámara Tercera en lo Criminal, a 15 años de prisión efectiva por resultar autor material y penalmente responsable del delito de homicidio simple, agravado por la participación de un menor, en concurso real con robo simple. En tanto, Alfredo Gonzalo Aguirre (27) alias “Negro” ó “Tatín” recibió la pena de 13 años de prisión efectiva por resultar partícipe necesario. Ambos cumplirán su condena en el penal de villa Las Rosas.
El otro de los imputados, un menor de 17 años, “Coti”, fue declarado responsable por ser partícipe necesario de homicidio simple y permanecerá en el hogar Michel Torino a disposición del Juzgado de Menores 1, hasta que se realice un juicio de aplicación de pena. El Tribunal, además, ordenó remitir a la fiscal penal de turno, copia de los antecedentes correspondientes a las testigos María Rita del Valle Liendro, Claudia de los Ángeles Rocha, Cintia Alejandra Isasmendi, Yésica Maribel Maldonado y Carolina Delgado, ante la posible comisión del delito de falso testimonio, pues se presume que mintieron en sus declaraciones. La audiencia, encabezada por los jueces Alberto Fleming, Antonio Morosini y Sandra Espeche, se inició a las 9.50 y culminó a las 13.05, luego de un cuarto intermedio que duró tres horas. Intervino la fiscal Graciela Herrera. El querellante fue el abogado Pablo Ochoa. Al ser consultado por el presidente del Tribunal, sobre si deseaba expresar algunas palabras antes del veredicto, Terán manifestó: “Que se haga justicia porque no maté a nadie. Dejo todo en manos de Dios como corresponde”. Seguidamente habló Aguirre: “ Yo no participé de ningún hecho y quiero pedir a la madre del fallecido y familiares el apoyo para que se haga justicia”, sostuvo. Finalmente el menor de 17 años imputado en la causa aseguró: “Soy inocente, que se haga justicia doctor”. Los sentenciados vestían remeras, camperas, jeans y zapatillas de marca.
Disconformidad y enojo
Tras conocerse el fallo, la madre de la víctima y el abuelo de la misma estallaron en llanto y gritos. “No te van a alcanzar los 15 años ¿Sabés Tarti? Le quitaste la vida a mi hijo. ¡Sos un asesino! Háganse cargo de lo que le hicieron”, dijo Beatriz Aparicio, la madre del joven asesinado. “Es el culpable de nuestra desgracia. No me voy a quedar con esto”, manifestó Ramón Zapana, abuelo del fallecido.
Los familiares de Terán y Aguirre estallaron en llanto y se negaban a retirarse de la sala. “Que paguen los culpables, ellos son inocentes”, aseguraban. Una vez fuera del recinto se mostraron ofuscados, molestos ante la familia de la víctima, a quienes insultaban y acusaban por las condenas.
Un fuerte operativo policial de seguridad fue llevado a cabo a fin de despejar rápido el recinto y para que los familiares no tuvieran contacto. “Considero que Terán merecía una pena de 18 o 20 años de prisión. Voy a seguir luchando porque faltan responsables: el personal de S‘kombros y del Samec. A mi hijo lo voy a recordar con una sonrisa, lo llevo para siempre en mi corazón”, finalizó emocionada Beatriz Aparicio.