Al final, ¿existen o no las sirenas? La verdad es que si contestamos afirmativamente nos arriesgamos a ser el centro de las bromas de nuestro entorno. Pero cuando nos hablan de la posibilidad de que alguien las haya visto y como prueba de ello haya subido un video a la red, ya comienza a picar la curiosidad.
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Al final, ¿existen o no las sirenas? La verdad es que si contestamos afirmativamente nos arriesgamos a ser el centro de las bromas de nuestro entorno. Pero cuando nos hablan de la posibilidad de que alguien las haya visto y como prueba de ello haya subido un video a la red, ya comienza a picar la curiosidad.
Y es esto seguramente lo que sucede con el video que un buzo anónimo dice haber grabado y subido a la red, a tal punto que lleva más de un millón ochoscientas mil visitas. Realmente todo un éxito.
De sirenas y otros peces
Las sirenas, según cuenta el buzo anónimo, se dejan ver en la Gran Barrera de Arrecifes, Mar del Coral, en la costa de Queensland, Australia. El sitio es una especie de rompeolas natural de 2.000 kilómetros de longitud habitado por unas 350 especies de coral diferentes, acaso la mayor estructura jamás construida por organismos vivos.
El video recibió un alud de visitas, lo cual no prueba mucho más que el enorme deseo de los cibernautas por presenciar la manifestación de auténticas sirenas. El buzo cuenta que filmó sus incursiones durante dos días seguidos tratando de probar una caja que le permitiera filmar bajo el agua. Según el relato que hace en off, la visibilidad era tan mala que la primera vez "ni él se dio cuenta" de lo que había filmado. Hasta que lo vio en la computadora. Volvió al otro día a esperar su regreso y filmó por segunda vez "algo raro". Para él, el hecho de que "reincidiera" evidenciaba que fue una sirena de verdad. "Alguien podría haberme gastado una broma una vez. Pero ¿dos veces?". Sin embargo esto se contradice con el hecho de que afirma que son dos sirenas diferentes debido a que la cola no se corresponden.