Jueces, abogados, intelectuales y dirigentes políticos, sociales y sindicales afines al kirchnerismo debatirán mañana sobre ‘la necesidad de una nueva Constitución‘ Nacional, aunque aclararon que en esta discusión no buscan incluir la eventual ‘re-reelección‘.
inicia sesión o regístrate.
Jueces, abogados, intelectuales y dirigentes políticos, sociales y sindicales afines al kirchnerismo debatirán mañana sobre ‘la necesidad de una nueva Constitución‘ Nacional, aunque aclararon que en esta discusión no buscan incluir la eventual ‘re-reelección‘.
Entre los expositores del panel se encuentran el juez de la Corte Suprema, Eugenio Zaffaroni; el constitucionalista Eduardo Barcesat; el intelectual de Carta Abierta, Ricardo Forster; y el
profesor de Derecho Constitucional, Raúl Gustavo Ferreyra.
El panel está impulsado por dirigentes alineados con el Gobierno de Cristina Fernández, como el titular del partido MILES, Luis D Elía; el referente del Frente Grande, Eduardo Sigal; y el referente de la CTA, Pedro Wasiejko.
Si bien luego de la abrumadora mayoría que consiguió la Presidenta en las elecciones de octubre pasado se comenzó a hablar de la posibilidad de reformar la Carta Magna para permitirle un tercer mandato consecutivo, los organizadores aseguraron que esta discusión no esconde esa intención.
‘No prendemos cerrar nada. Dijimos que íbamos a abrir un debate, y en eso estamos empeñados. Algunos pensarán que queremos proponer la re-reelección. Somos conscientes de que puede haber miradas parciales. La nuestra quiere ser parte del desafío de este siglo y los que proponemos este debate estamos dispuestos a firmar el compromiso de que no queremos ni aceptamos la re-reelección‘, resaltaron.
Al respecto, D Elía agregó: ‘Hay que dejar de lado cualquier cláusula reelectiva que genere sospechas en una nueva Constitución. Y me parece que la primera que quiere eso es Cristina‘.
En declaraciones radiales, el titular de la Federación de Tierra y Vivienda (FTV) sostuvo que no tiene ‘dudas‘ de que la jefa de Estado al no buscar su tercer mandato ‘estaría acumulando
un enorme prestigio político y un enorme consenso social que le permitiría poner a su delfín (para el 2015), conducir el movimiento nacional y popular por muchos años, y volver en cuatro años si ella quisiera‘.
A su entender, ‘hay que hacer una Constitución nueva que exprese los avances del campo del pueblo‘.
‘Hay que construir un nuevo Estado. Esto hay que ponerlo en debate durante un año en la Argentina, porque llega un punto en los modelos de avance popular que si no cambiamos el marco constitucional para que se adapte a la nueva realidad es muy difícil profundizarlo‘, afirmó D Elía.
Los expositores se reunirán en una Mesa Redonda abierta al público para debatir en el Salón de Actos de la Facultad de Derecho de la UBA, a las 18.
‘Quienes impulsan la modificación de la Carta Magna, lo hacen en el entendimiento de que no se trata de seguir haciéndole parches a una Constitución cuya matriz viene de 1853, ya que las transformaciones de nuestro país y el mundo nos desafían a pensar en un nuevo orden jurídico e institucional para que la Argentina esté a tono con los desafíos del siglo XXI‘, señalaron los organizadores.
Según afirmaron en un comunicado, el debate girará en torno a ‘cómo debe ser la estructura de poderes; cómo debe ser el federalismo de este siglo; si los recursos naturales deben ser
patrimonio nacional o de las provincias; y si la política de Medio Ambiente debe ser nacional o provincial‘.
También se abocarán a discutir ‘si los nuevos derechos civiles deben tener o no rango constitucional y si la integración regional sudamericana y latinoamericana deben ser o no parte del debate‘.
La discusión comenzará luego de que en enero pasado el vicepresidente, Amado Boudou, hiciera explícito su apoyo a una posible re-reelección de Cristina, al señalar que no había que hablar de ‘post kirchnerismo‘.
Esas palabras tuvieron eco en sectores del ultrakirchnerismo y generaron fuertes críticas de la oposición.
En ese marco, uno de los expositores de mañana, el juez Zaffaroni, se mostró a favor de la reforma, aunque planteó que el nuevo sistema gubernamental debería ser parlamentario.