El ministro de Seguridad provincial, Eduardo Sylvester, también hizo hincapié en la necesidad de potenciar el rol del comité de seguridad deportiva, y que cobre identidad y fuerza propia en la medida que se generen inconvenientes que atenten contra los espectáculos deportivos. Y en este sentido, rescató el diálogo constante entre las partes como la base de cualquier medida a implementar en el afán de combatir la violencia.
“Nosotros, desde que nos hicimos cargo en el mes de diciembre, decidimos continuar con una mecánica de trabajo que viene dando buenos resultados, que es la conformación del comité, del cual participan la Liga Salteña y los clubes, además de la Policía y la gente del estadio. La idea es potenciar el comité y, a medida que se produzcan situaciones irregulares, ir generando el diálogo que nos permita encontrar soluciones. Tenemos clarísimo que aquellos que generan los problemas son muy pocos en comparación con la gente que acude a los estadios. Y la idea es seguir generando diálogo, no solo con los directivos de los clubes, sino también con los referentes de las hinchadas”, manifestó el ministro en referencia a un tema urticante que tiene que ver con la relación de los líderes de las agrupaciones y las instituciones salteñas.
Un dato no menor e insoslayable tiene que ver con las diferencias que viene manteniendo el Centro Juventud Antoniana con aquellos hinchas que reclamaron entradas de favor y causaron desórdenes en el Martearena, tras el encuentro que disputó el antoniano con San Martín de Tucumán, en febrero pasado.
Puntualmente, el diálogo con las barras es un ítem que se debe recuperar y fortalecer en el fútbol salteño, y que sean los mismos hinchas quienes colaboren para apartar, señalar y estigmatizar a aquellos que generen el caos dentro y fuera de las canchas.
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El ministro de Seguridad provincial, Eduardo Sylvester, también hizo hincapié en la necesidad de potenciar el rol del comité de seguridad deportiva, y que cobre identidad y fuerza propia en la medida que se generen inconvenientes que atenten contra los espectáculos deportivos. Y en este sentido, rescató el diálogo constante entre las partes como la base de cualquier medida a implementar en el afán de combatir la violencia.
“Nosotros, desde que nos hicimos cargo en el mes de diciembre, decidimos continuar con una mecánica de trabajo que viene dando buenos resultados, que es la conformación del comité, del cual participan la Liga Salteña y los clubes, además de la Policía y la gente del estadio. La idea es potenciar el comité y, a medida que se produzcan situaciones irregulares, ir generando el diálogo que nos permita encontrar soluciones. Tenemos clarísimo que aquellos que generan los problemas son muy pocos en comparación con la gente que acude a los estadios. Y la idea es seguir generando diálogo, no solo con los directivos de los clubes, sino también con los referentes de las hinchadas”, manifestó el ministro en referencia a un tema urticante que tiene que ver con la relación de los líderes de las agrupaciones y las instituciones salteñas.
Un dato no menor e insoslayable tiene que ver con las diferencias que viene manteniendo el Centro Juventud Antoniana con aquellos hinchas que reclamaron entradas de favor y causaron desórdenes en el Martearena, tras el encuentro que disputó el antoniano con San Martín de Tucumán, en febrero pasado.
Puntualmente, el diálogo con las barras es un ítem que se debe recuperar y fortalecer en el fútbol salteño, y que sean los mismos hinchas quienes colaboren para apartar, señalar y estigmatizar a aquellos que generen el caos dentro y fuera de las canchas.