Central Norte atraviesa una gran racha positiva. Lleva seis partidos sin perder, tres como visitante, con tres victorias y dos empates y va por más.
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Central Norte atraviesa una gran racha positiva. Lleva seis partidos sin perder, tres como visitante, con tres victorias y dos empates y va por más.
Central Norte dejó en llamas a San Martín, lo cacheteó en su propia casa, le mostró los dientes y toda su ambición con una victoria tremenda, por 2 a 1, que será recordada por años, que ratificó la superioridad sobre los tucumanos en el mano a mano.
Con Ceballos, Weiner y Noir inspirados, el cuervo devolvió golpe por golpe; de movida, Ceballos probó con un tiro libre y Pave la sacó al córner; luego, Maino se quedó con un tiro rasante a Rizo. Así se daba el partido. Mientras uno arremetía, el otro devolvía. Hasta que Weiner, tras perderse una media vuelta increíble, aprovechó al máximo su segunda aparición: Noir le sirvió el centro y el Eléctrico metió un derechazo tremendo hacia el fondo del arco.
Central, antes del cuarto de hora, potenció la presión sobre el dueño de casa. Lo obligaba a marcar tres tantos y el equipo de Amaya no tuvo otra que ir en busca de Maino. Así apareció Ramón Córdoba, por detrás de todos; aprovechó una grosera desconcentración de la defensa cuerva y venció a Maino. El santo tucumano parecía volverse una tromba.
Pero el equipo de Piozzi aguantó, supo reponerse y para ello contó con Ceballos, quien se cargó el equipo al hombro en el tramo final de la primera etapa. Asusto a todo el estadio con un tiro libre y, minutos después, encabezó un ataque letal, que Noir cerró con un golazo.
En el complemento, Central Norte no cambió el libreto. Ajustó la marca, en defensa y mediocampo, mantuvo el orden y la concentración y estuvo cerca del tercero y se terminó llevando a Salta otra merecida clasificación.