“La UDA en varias provincias va a pedir la reapertura de la paritaria porque lo que discutimos en marzo quedó rezaga do”.
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“La UDA en varias provincias va a pedir la reapertura de la paritaria porque lo que discutimos en marzo quedó rezaga do”.
El secretario general de la Unión de Docentes Argentinos pasó por Salta en el marco del congreso nacional de delegados que realiza el gremio en la provincia de Jujuy. En diálogo con El Tribuno defendió la escuela pública y dijo que hay que cuidar a los docentes.
Confirmó que por la inflación que está superando el 30 por ciento la UDA va a pedir reapertura de las paritarias en varias provincias. También señaló que al sector le preocupan temas vertebrales que hacen a la educación como la violencia escolar, la infraestructura y la capacitación.
¿Cree que en la Argentina la educación perdió calidad?
Hay que trabajar mucho para tener un sistema educativo que realmente dé respuestas a los requerimientos de la sociedad. Se ha avanzado en muchos aspectos, pero todavía no es suficiente.
Por ejemplo, en el tema salarial, lamentamos cómo terminó la paritaria nacional que fue desarticulada por el ministro (Alberto) Sileoni. Lo que percibe hoy un maestro de jornada simple que ingresa al sistema educativo es prácticamente una decisión del Ministerio de Educación porque nosotros no terminamos de acordar la paritaria. Pedíamos 3.000 pesos y ellos la cerraron por mucho menos.
¿Cómo ve a la escuela pública?, ¿cree que perdió prestigio?
Por ahí se dice que una familia a la hora de decidir dónde mandar a su hijo a estudiar opta por una escuela privada porque aduce que no hay tanta medida de fuerza, que hay una capacitación permanente, por lo que no hay cortes en el servicio. Yo haría el análisis desde otro lado: los grandes educadores y científicos estudiaron en escuelas y universidades públicas. Creo que nosotros tenemos que seguir apostando a una escuela pública de calidad porque no nos olvidemos de que ahí cualquiera puede ir a estudiar: el que más tiene y el que menos también.
El impuesto a las ganancias es una de sus tantas preocupaciones...
Sí. Hay docentes que se están por jubilar y que han llegado a un salario con el máximo de horas cátedras, que ronda en 9.000 pesos, y hoy a ellos se les está descontando casi 1.000 pesos de impuesto a las ganancias.
El salario no debe verse como una ganancia, es una retribución por un trabajo que se brinda. Presentamos un proyecto en el Congreso de la Nación no para que se eleve el mínimo no imponible sino para que directamente se exceptúe al sector docente de este impuesto que es totalmente injusto.
En materia salarial, ¿cuál es la situación de Salta con respecto al resto del país?
Hay que reconocer que en la Argentina los salarios se han ido recuperando, pero todavía falta mucho. Un docente que recién se inicia en Salta gana en promedio 3.400 pesos con un sueldo básico de 1.100 pesos. Hay que seguir trabajando en este sentido.
El ministro Sileoni habló de un 30 por ciento de ausentismo docente y dijo que es un problema serio que debe resolverse. ¿Qué opina?
Muchas veces se dan porcentajes sin fundamentarlos. El ausentismo obedece muchas veces a problemas irresueltos por el propio Estado. En muchos lugares del país el docente sostiene el sistema educativo con ausencia del Estado y se capacita en servicio con su propio salario.
</PREGUNTA>Según el Ministerio de Educación, Salta tiene el 14 por ciento de ausentismo.
Si bien tenemos que trabajar para que haya menos, de manera comparativa nos parece que hay provincias donde el ausentismo es más alto.
Entonces, en lugar de ausentismo, ¿de qué hablaría usted?
Hablaría de infraestructura para mejorar las condiciones de trabajo, de capacitación en servicio, de cómo mejoramos la escuela pública, de calidad educativa, de la convivencia escolar para erradicar la violencia en el ámbito de las escuelas. Me parece que hay muchos temas vertebrales que no están en agenda y se deberían debatir en el Consejo Federal de Educación, pero con la participación de los sindicatos.
Muchas veces los ministros concurren a las reuniones del CFE y por no quedar mal con el Gobierno nacional dicen a todo que sí y después cuando vuelven a su provincia les cuesta aplicar este tipo de medidas.
¿Qué piensa de que elevaron a 190 los días de clase?
Me parece bien y ojalá que haya más días de clase, 200 si se puede. Pero hay provincias que van a tener dificultades en épocas de verano y en invierno porque las escuelas no están en condiciones. Antes de elevar los días de clase hay que ver cómo están los establecimientos públicos.
¿Cree que el docente está preparado para trabajar con los chicos de hoy que llevan a la escuela distintas problemáticas sociales?
El docente, por ejemplo, no está capacitado para afrontar situaciones de violencia en el ámbito de la escuela; además, no hay normativas claras en este sentido. Hay países que han avanzado más en materia de erradicación de la violencia y que tienen leyes como en el caso de Perú y México.
Lamentablemente nuestro país exhibe el primer lugar en la región en violencia en las escuelas, pero los gobiernos nacional y provinciales no quieren reconocer esto. En los diarios se publican los casos de mayor resonancia, pero prácticamente a diario hay violencia en las escuelas.
¿Qué opina de las horas libres que tienen los chicos en las escuelas?
Hay muchas horas libres porque lamentablemente hay una reforma curricular que se aprobó en el CFE para la secundaria y las técnicas. En las técnicas, en muchos lugares se han reducido las horas de taller, las horas de dibujo, fundamentales para generar destrezas en el alumno. Se ha reducido historia y lo que antes se daba en dos años ahora hay que explicarlo en un solo año y en menos horas. Hubo disponibilidad de docentes...
No es que las horas libres sean solo porque el docente falta sino por la reforma curricular poco debatida. Hoy en el país hay cientos de docentes en disponibilidad por esta reforma que ha producido un montón de horas libres, pero no somos culpables nosotros. Son reformas que apoyan los ministros en el CFE y que no las discuten.
Este año costó cubrir cargos docentes en el interior provincial, muchos dicen que es porque el esfuerzo no vale...
Para tener un docente en un lugar periférico hay que mejorar el salario y las condiciones de trabajo. Hay que generar otros tipos de cuestiones para empezar a entusiasmar; ojalá esto se supere porque es una dificultad. La educación tiene que llegar a todos los rincones del país y es un problema serio si nuestros jóvenes después de capacitarse no quieren entrar al sistema.
¿Cuál es la situación de la seccional de Salta?
Actualmente hay una comisión normalizadora y confiamos que en breve tiempo los afiliados puedan elegir su propia conducción.
Hubo polémica en la UDA con la conducción anterior; se dice que lo sacaron al profesor Angel Rivero por cuestiones políticas...
Nosotros no politizamos el sindicato; es más, hay expresiones de todo tipo en la misma conducción nacional. Lo que pasó es que la gestión anterior no cumplía con la tarea docente que habíamos impuesto para favorecer la educación y a los educadores.
¿Por qué la UDA no participa de la mesa de negociación provincial?
Grave error del Gobierno de Salta. Lo mejor que le puede pasar a un gobierno democrático es ser precisamente democrático, abierto, pluralista y participativo. Esto lo voy a conversar con el ministro, pero es un grave error que un gremio con personería gremial legitimado no tenga un lugar donde opinar. Esto debe ser corregido.
¿Qué metas a corto plazo tienen para la seccional Salta?
Vamos a empezar a capacitar a los docentes salteños, no solo a los de la escuela secundaria sino también técnicas. No obstante, también cuentan con un sistema a distancia que ya está disponible.
¿La UDA va a pedir reapertura de las paritarias?
La UDA en varias provincias va a pedir la reapertura de la paritaria o al menos la discusión salarial porque lo que discutimos en marzo prácticamente quedó rezagado. En la mayoría de los casos se arregló entre un 18 y un 21 por ciento y hoy estamos hablando de una inflación que está superando el 30 por ciento.
No estamos pidiendo cosas desmedidas, queremos salarios razonables, que el Estado entienda que la educación es vertebral para cualquier tipo de proyecto. Un país sin una escuela pública de calidad no tiene proyectos.
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