Indignante. Un trabajador, identificado como Javier Ucelli (34), sufrió la sustracción de sus pertenencias durante la madrugada de ayer, momentos después de haber dejado estacionado el colectivo de la empresa El Indio en la intersección de 20 de Febrero y Alsina, en el macrocentro capitalino.
El hecho ocurrió a la 0.30, cuando el conductor de la mencionada empresa se dirigió a cenar a un local de la zona y, al regresar, encontró la puerta del vehículo violentada.
El o los delincuentes se llevaron del interior del ómnibus un estéreo, un reproductor de DVD, una caja de herramientas, más diferentes elementos personales como así también la documentación del colectivo de larga distancia.
Momentos después, el damnificado se trasladó a la comisaría 2, donde radicó la denuncia.
Una zona “segura”
Efectivos recorrieron la zona del hecho y, si bien no lograron ubicar a los delincuentes, sospechan de un grupo de jóvenes adictos a la pasta base de cocaína que deambulan por inmediaciones de las vías del ferrocarril.
Fuentes policiales informaron a este matutino que el hecho les llamó la atención, ya que habitualmente esa zona, que es bastante concurrida por jóvenes, se encuentra vigilada por un grupo de personas que cuida coches durante los fines de semana, aunque al entrevistarse con ellos aseguraron a los uniformados que no observaron movimientos extraños.
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Indignante. Un trabajador, identificado como Javier Ucelli (34), sufrió la sustracción de sus pertenencias durante la madrugada de ayer, momentos después de haber dejado estacionado el colectivo de la empresa El Indio en la intersección de 20 de Febrero y Alsina, en el macrocentro capitalino.
El hecho ocurrió a la 0.30, cuando el conductor de la mencionada empresa se dirigió a cenar a un local de la zona y, al regresar, encontró la puerta del vehículo violentada.
El o los delincuentes se llevaron del interior del ómnibus un estéreo, un reproductor de DVD, una caja de herramientas, más diferentes elementos personales como así también la documentación del colectivo de larga distancia.
Momentos después, el damnificado se trasladó a la comisaría 2, donde radicó la denuncia.
Una zona “segura”
Efectivos recorrieron la zona del hecho y, si bien no lograron ubicar a los delincuentes, sospechan de un grupo de jóvenes adictos a la pasta base de cocaína que deambulan por inmediaciones de las vías del ferrocarril.
Fuentes policiales informaron a este matutino que el hecho les llamó la atención, ya que habitualmente esa zona, que es bastante concurrida por jóvenes, se encuentra vigilada por un grupo de personas que cuida coches durante los fines de semana, aunque al entrevistarse con ellos aseguraron a los uniformados que no observaron movimientos extraños.