En menos de 15 días ingresará al Concejo Deliberante el proyecto que fijará las reglas de urbanización para el centenar de hectáreas de Pereyra Rozas y las 39 ha que rodean el estadio Martearena. Así lo afirmó ayer Fanny Velarde, secretaria de Planeamiento Urbano, ante los ediles.
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En menos de 15 días ingresará al Concejo Deliberante el proyecto que fijará las reglas de urbanización para el centenar de hectáreas de Pereyra Rozas y las 39 ha que rodean el estadio Martearena. Así lo afirmó ayer Fanny Velarde, secretaria de Planeamiento Urbano, ante los ediles.
“Si construye viviendas un privado o el Estado, para nosotros es indistinto. El trámite tiene que ser el mismo: recién se puede edificar tras la aprobación de la Secretaría de Planteamiento”, remarcó la funcionaria.
El ordenamiento urbano que se esbozó entre colegios profesionales, cámaras empresarias y otras instituciones que conforman el Consejo Municipal de Desarrollo Urbano Ambiental (Comdua) exigirá más del 60% del espacio para edificios de altura, de hasta un máximo de 45 metros; grandes avenidas, al estilo bulevar; espacios verdes; dos escuelas primarias; dos secundarias y otras instituciones.
El menor porcentaje será para las casas de una sola planta, dúplex o los departamentos de cuatro pisos. Estos son los modelos que el IPV hizo en los últimos años. La Provincia deberá replantear y modernizar los desarrollos habitacionales y pensar en propiedades horizontales, que jamás edificó, cercanas a los 10 pisos.
El martes Diputados dio media sanción al proyecto de expropiación de las tierras que figuran en Inmuebles con las matrículas 164.320, 164.322 y 164.323, conocidas como Pereyra Rozas, para cederlas al IPV.
El texto, que no indica el precio que se pagará a los propietarios, fue presentado en mayo por el presidente del cuerpo, Santiago Godoy.
“El municipio tiene la autonomía y la facultad de definir cómo se construye en la ciudad”, remarcó ayer Velarde al presentar el plan ante los concejales.
El régimen de urbanización para Pereyra Rozas y los terrenos cercanos al estadio Martearena entrará como un proyecto de ordenanza.
Los ediles deberán aprobarlo o rechazarlo.