Moria Casán es como una caja de Pandora. Todavía no dejó de ser noticia por un confuso episodio policial ocurrido en Paraguay, que la tiene como protagonista, cuando se subió al escenario de un teatro porteño, se besó en la boca con Sofia Gala (fuera del vínculo madre-hija en la ficción) y desató un vendaval de comentarios de todos los colores. Mientras siguen las opiniones cruzadas a lo largo y ancho del país, Moria y Sofía, en triángulo amoroso con Mario Pasik, dirigidos por José María Muscari, sube a escena todos los días en el Teatro Picadilly de la calle Corrientes, con la obra Tres Mitades.
Es una puesta para la reflexión de lo que sucede amorosamente entre las parejas, sintetizó el director Muscari, en una conversación telefónica con El Tribuno.
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Moria Casán es como una caja de Pandora. Todavía no dejó de ser noticia por un confuso episodio policial ocurrido en Paraguay, que la tiene como protagonista, cuando se subió al escenario de un teatro porteño, se besó en la boca con Sofia Gala (fuera del vínculo madre-hija en la ficción) y desató un vendaval de comentarios de todos los colores. Mientras siguen las opiniones cruzadas a lo largo y ancho del país, Moria y Sofía, en triángulo amoroso con Mario Pasik, dirigidos por José María Muscari, sube a escena todos los días en el Teatro Picadilly de la calle Corrientes, con la obra Tres Mitades.
Es una puesta para la reflexión de lo que sucede amorosamente entre las parejas, sintetizó el director Muscari, en una conversación telefónica con El Tribuno.
Esta es una reacción que imaginaste cuando planeaste la obra.
Yo lo tomo como un condimento de este trabajo. La obra de teatro supera ampliamente la situación del beso. Eso queda en el público que viene a la sala y con la crítica especializada que la estuvo viendo estos días y no hace más que sacar buenas críticas. También acepto las reglas del juego y sé que trabajar con Moria y con Sofía, que son dos personajes muy mediáticos podía traer aparejada esta polémica. Yo estoy muy seguro del producto artístico que estamos haciendo y por suerte la obra trasciende totalmente cualquier tipo de polémica por los besos, por el desnudo, para meterse en algunas polémicas un poco más comprometidas como podrían ser la durabilidad del amor, la fidelidad y las apariencias dentro de las parejas.
¿Te sorprende la polémica?
La verdad es que me sorprendió muy profundamente. Es una obra de corte artesanal, estamos en la calle Corrientes pero en el Picadilly, una sala pequeña, de 300 espectadores. Nunca imaginé que este espectáculo fuera a despertar tanta polémica y a convertirse en tema de comentario de interés general, desde el primer programa de chimentos hasta el último noticiero, en gráfica, radio y televisión. Vengo haciendo teatro hace mucho tiempo y nunca había alcanzado un espectáculo mío este nivel de repercusión.
Por qué crees que la crítica se ha focalizado tanto en el beso?
Creo que porque son Moria y su hija, más que en otra cosa. Porque aparte hay un error de base, porque independientemente de que sean madre e hija, en la obra se dan un beso pero no lo hacen desde esos roles, en la escena no están unidas por ese vínculo. En La Cabra, por ejemplo, Julio Chávez se da un terrible beso con el hijo de la ficción, y ahí sí el espectáculo muestra un incesto. Tres Mitades no tiene nada que ver con el incesto, por el contrario, es un espectáculo sobre el amor y sobre las complejidades del amor.
El periodista Chiche Gelblung opinó que hay incesto. ¿Crees que esa opinión puede influir en la gente?
No tengo ni idea. Pero en principio te digo que Chiche no vio la obra, opina por una foto que vió y como todos sabemos, en teatro la única forma que alguien puede tener opinión es que alguien lo vea. A diferencia del cine, la tele o la gráfica, tiene el gran poder de que es vivo en el momento que sucede. No es traducible a una foto, una imagen no es lo mismo que una obra, una imagen estática no es lo mismo que una escena. Por suerte estoy ilusionado porque sé que Chiche va a venir a ver la obra y seguramente, después va a poder contrarrestar la opinión que tenía a priori.
¿El amor se termina?, ¿qué planteás en la obra?
No se termina. Creo que se complejiza, muta, y todo el tiempo está en una transformación y abre preguntas. De eso trata Tres Mitades. Tres Mitades es un espectáculo que plantea muchas preguntas y que uno como espectador tiene la posibilidad de contestárselas desde lo que proponemos sobre el escenario. Hay que ver en qué lugar se para cada espectador para crear su propia ficción frente a lo que está viendo. Es una comedia muy intensa que divierte desde el principio hasta el final y todo el tiempo habla de lo que sucede adentro y afuera de las parejas. De las cosas del amor...
El dato
Por ahora, Muscari no tiene previsto venir al interior con la obra. Es una temporada corta de doce semanas.