El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, estimó ayer que en “seis o siete años” el país recuperará el autoabastecimiento energético, señaló que se pretende bajar la importación de gas “a un ritmo de 10 por ciento anual” y afirmó que la petrolera Repsol fracasó en la estrategia de “bloquear” a YPF, tras la expropiación.
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El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, estimó ayer que en “seis o siete años” el país recuperará el autoabastecimiento energético, señaló que se pretende bajar la importación de gas “a un ritmo de 10 por ciento anual” y afirmó que la petrolera Repsol fracasó en la estrategia de “bloquear” a YPF, tras la expropiación.
“Quizás en seis o siete años estemos en valores de producción que nos puedan llevar al autoabastecimiento. Pero no al autoabastecimiento de los "90, donde sobraba la energía porque no había trabajo. Con desocupados y PBI que se reduce, no me interesa el autoabastecimiento”, planteó De Vido.
El ministro acusó al gobierno español de “querer hacer fracasar a la Argentina en su política de recuperación de su mercado de combustibles”. Y señaló: “El intento de Repsol de bloquear el avance de acuerdos de la empresa nacionalizada [YPF] con el mundo del petróleo fracasó”. Además cargó contra algunos medios de comunicación argentinos: “Ha habido una importante distorsión en cuanto a la difusión de las noticias”, enfatizó en una entrevista. Y agregó: “La ley de la recuperación de YPF no habla solamente de la nacionalización, sino también del autoabastecimiento del país, donde son responsables no sólo YPF sino el resto de las empresas. Si YPF es la empresa bastión en el desarrollo, las demás van a seguirla inevitablemente. Y las que no estén dispuestas a ello porque no les es negocio, venderán su empresa o verán qué hacen”, manifestó.
En materia energética, el funcionario sostuvo que la idea “es autoabastecernos, llevar la importación a cero. Ojalá podamos bajar la importación a un ritmo del 10 por ciento por año”, expresó el funcionario en una entrevista.
Consultado sobre el interés expresado por algunas petroleras en invertir en el país, De Vido aseveró que “eso habla a las claras que el intento de Repsol de bloquear el avance de acuerdos de YPF fracasó. Evidentemente fracasó Repsol, porque la lógica que pretendió llevar adelante fue muy arcaica, ya no funciona en el mundo actual, sobre todo cuando hay países con gobiernos que están decididos a ejercer la soberanía en forma plena”, concluyó.