Un grupo de 25 jóvenes que cursan el cuarto año en el colegio San Nicolás recaudan fondos para mejorar la calidad de vida de su compañero: Julián Nicolás Díaz Saldaña (16), quien sufre una enfermedad congénita: atrofia espinal tipo 2. Este cuadro se le complica además por una afección respiratoria: asma. Julián vive con sus padres y dos hermanos en el barrio Valdivia.
Como la familia es de escasos recursos económicos y debido a un desempeño académico excelente, él recibió una beca para estudiar en el San Nicolás. Ana Carolina López, una de las mamás que acompañan a los chicos en la campaña solidaria “Por una vida mejor para Julián”, contó que el adolescente tiene la obra social Ospida y que esta prestataria no cubre todas sus necesidades. Por ejemplo reconocen solo $150 para sus anteojos, cuando el presupuesto mínimo que consiguieron sus papás es de $2.100. Además debieron aguardar más de un año a que les entregaran una silla de ruedas manual.
Para extender por un tiempo su autonomía de traslado, Julián precisa una silla de ruedas de propulsión eléctrica o motorizada, debido a que sus brazos perdieron la fuerza necesaria para autoimpulsarse. “Nosotras ya presentamos una nota al Gobierno de la Provincia, pero la cuestión es la celeridad en los tiempos, la urgencia que este trámite tiene dadas las características de su enfermedad. La Convención sobre los Derechos del Niño establece que el Estado debe asistir a familias en situaciones como estas y debe velar por la salud de los niños”, reflexiona Carolina.
Para recepcionar la ayuda abrieron la caja de ahorro N§ 01104534 30045328905001 en la sucursal 3070 del Banco Nación a nombre de Julián Nicolás Díaz Saldaña. También hay teléfonos de contacto: (0387) 154526330 y 154412239. “El es un ejemplo de joven, muy querido por sus amigos”, dice Carolina. Por último un fragmento del mensaje de sus compañeros: “Te pido, por favor, que nos ayudes a ayudarlo. El necesita de vos, de mí, de todo aquel que crea que merece una mejor calidad de vida. (...) No mires a los costados. El está delante de ti, esperando que juntos logremos nuestro objetivo”.
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Un grupo de 25 jóvenes que cursan el cuarto año en el colegio San Nicolás recaudan fondos para mejorar la calidad de vida de su compañero: Julián Nicolás Díaz Saldaña (16), quien sufre una enfermedad congénita: atrofia espinal tipo 2. Este cuadro se le complica además por una afección respiratoria: asma. Julián vive con sus padres y dos hermanos en el barrio Valdivia.
Como la familia es de escasos recursos económicos y debido a un desempeño académico excelente, él recibió una beca para estudiar en el San Nicolás. Ana Carolina López, una de las mamás que acompañan a los chicos en la campaña solidaria “Por una vida mejor para Julián”, contó que el adolescente tiene la obra social Ospida y que esta prestataria no cubre todas sus necesidades. Por ejemplo reconocen solo $150 para sus anteojos, cuando el presupuesto mínimo que consiguieron sus papás es de $2.100. Además debieron aguardar más de un año a que les entregaran una silla de ruedas manual.
Para extender por un tiempo su autonomía de traslado, Julián precisa una silla de ruedas de propulsión eléctrica o motorizada, debido a que sus brazos perdieron la fuerza necesaria para autoimpulsarse. “Nosotras ya presentamos una nota al Gobierno de la Provincia, pero la cuestión es la celeridad en los tiempos, la urgencia que este trámite tiene dadas las características de su enfermedad. La Convención sobre los Derechos del Niño establece que el Estado debe asistir a familias en situaciones como estas y debe velar por la salud de los niños”, reflexiona Carolina.
Para recepcionar la ayuda abrieron la caja de ahorro N§ 01104534 30045328905001 en la sucursal 3070 del Banco Nación a nombre de Julián Nicolás Díaz Saldaña. También hay teléfonos de contacto: (0387) 154526330 y 154412239. “El es un ejemplo de joven, muy querido por sus amigos”, dice Carolina. Por último un fragmento del mensaje de sus compañeros: “Te pido, por favor, que nos ayudes a ayudarlo. El necesita de vos, de mí, de todo aquel que crea que merece una mejor calidad de vida. (...) No mires a los costados. El está delante de ti, esperando que juntos logremos nuestro objetivo”.