En su segundo día consecutivo de críticas al Gobierno nacional, el líder de la CGT oficialista, Antonio Caló, rechazó ayer el congelamiento de precios, afirmó que “la economía está estancada” y cuestionó la situación inflacionaria en el país.
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En su segundo día consecutivo de críticas al Gobierno nacional, el líder de la CGT oficialista, Antonio Caló, rechazó ayer el congelamiento de precios, afirmó que “la economía está estancada” y cuestionó la situación inflacionaria en el país.
En su esfuerzo por diferenciarse cada vez más de la administración kirchnerista, el dirigente metalúrgico reclamó al Gobierno que convoque a “todos los actores sociales” para ampliar el período del congelamiento, al tiempo que le exigió que persiga a los “formadores de precios” para evitar una nueva escalada de “la inflación”, a la que definió como “el impuesto que más perjudica a los trabajadores”.
Además, volvió a sostener que la CGT que encabeza no permitirá que se ponga un techo porcentual a las paritarias, aunque dijo seguir con su apoyo al “plan económico” del Poder Ejecutivo al insistir con que la mejora de la industria de los últimos años permitió aumentar de “60 mil a 250 mil” la cantidad de afiliados de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
“La economía, dentro de la UOM... Estamos preocupados: damos salud a un millón de personas, tenemos que comprar aparatos (de tecnología médica) y se estancó la recaudación. Cuando se estanca la economía de un gremio es porque la economía (del país) está estancada”, enfatizó Caló.
Congelamiento de precios
El jefe de la Confederación General del Trabajo, hasta ahora afín a la administración central, volvió a criticar el acuerdo de precios por dos meses impulsado por el Gobierno, al reiterar que el congelamiento “por 60 días no sirve”.
“Los acuerdos de precios no sirven si no son sostenidos en el tiempo. Si el día 61 no tenemos un acuerdo sobre los precios, esto explota”, advirtió Caló en diálogo con radio Mitre.
El líder sindical agregó que “el impuesto que más perjudica a los trabajadores es la inflación” y, al volver a alertar que la CGT que encabeza no permitirá que se ponga un techo porcentual a las paritarias, argumentó que “no le sirve al movimiento obrero si acuerda un 20 por ciento de aumento salarial y, al día siguiente, se remarcan (los precios) al 25 por ciento”.
En esa línea, reclamó a las autoridades nacionales que “llamen a todos los actores sociales para ver cómo” se puede implementar una ampliación del período de congelamiento, al volver a exigir una “política de Estado” en ese sentido.
Asimismo, les reclamó que persigan a “los formadores de precio” para evitar una nueva escalada de la inflación.
“Es un tema difícil: hay muchos tramposos. Los trabajadores seguro que no somos los que fomentemos la inflación; algunos se quedan con la plata del pueblo”, expresó Caló.
El miércoles Caló encabezó una reunión de la “mesa chica” de la CGT que lidera y criticó el acuerdo de congelamiento de precios por 60 días anunciado por el Ejecutivo, además de reprobar una eventual pretensión oficial de limitar los aumentos que se negocien en paritarias. El dirigente metalúrgico, además, junto a sus colegas, acordó una reunión de todos los integrantes del Consejo.
El bloqueo camionero
se extendería
La protesta se profundizaría. El Sindicato de Choferes de Camiones continúa por segundo día consecutivo con el bloqueo de varios centros de distribución de la cadena Maxiconsumo, impidiendo el ingreso y salida de productos.
La protesta se produce en los centros de la firma que provee a almacenes, autoservicios y supermercados en las localidades bonaerenses de San Justo, Burzaco y Boulogne, y en la ciudad de Buenos Aires, en el barrio porteño de Villa del Parque.
Oscar Borda, secretario de la rama logística del sindicato que lidera Pablo Moyano, explicó que “se reclama el traspaso de los trabajadores que están en el sector de depósito al convenio 40789, que hasta ahora la empresa viene incumpliendo”, indicó.
“Hasta la fecha no sucedió y es por esto que los trabajadores, cansados de la dilación de parte de la firma, decidieron tomar esta medida hasta el cumplimiento del acta mencionada”, precisó el dirigente, frente a la sucursal de Villa del Parque de esa cadena.
La medida de fuerza, que comenzó el miércoles, consiste en la prohibición de ingreso y salida de productos de los 6 centros que tiene la cadena Maxiconsumo: en el barrio porteño de Villa del Parque, en San Justo, zona norte y Burzaco.
Borda advirtió que “se irían agregando otros lugares si no se encuentran respuestas por parte de la empresa, como Diarco y Jaguar, donde los trabajadores están en las mismas condiciones”.