El significativo hecho ocurrió en el camping municipal Sara Massini, de La Candelaria, y contó con la participación de 100 biker's de las provincias de Salta y Tucumán, en las categorías mini biker's, infantiles, prejuveniles, juveniles, sub 23 y promocional mayores de 35 años.
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El significativo hecho ocurrió en el camping municipal Sara Massini, de La Candelaria, y contó con la participación de 100 biker's de las provincias de Salta y Tucumán, en las categorías mini biker's, infantiles, prejuveniles, juveniles, sub 23 y promocional mayores de 35 años.
Mas allá de la competencia deportiva que tuvo como ganadores en categoría mini biker's a Romina Moroni y a Ricardo Sabalza, en infantiles a Micaela Ramírez y a Hernán Romano, en pre juveniles a Florencia Velarde y a Moisés Cardozo, sub 23 Emanuel Romano, lo más trascendente fue sin lugar a dudas la participación de los jóvenes Damián Guerra de La Candelaria y Juan Vellida de El Jardín, quienes son personas no videntes y por primera vez tomaban parte de una competencia deportiva. Ambos jóvenes corrieron un tramo de 300 metros y fueron acompañados por dos apoyos que les indicaban el camino a seguir.
“Mi objetivo es promover el espíritu deportivo en los chicos, jóvenes y mayores, como así también la integración de los chicos con capacidades diferentes”, manifestó el responsable de Candelaria Hockey Club, el profesor Pablo Roldán.
Asimismo dijo que “la idea es fomentar la integración de las personas con capacidades diferentes entre los jóvenes del pueblo y de otras localidades, según las actividades previstas. El fin es potenciar una plena integración de los grupos y el conocimiento mutuo entre los escolares”.
Manifestó además que a través del juego o el deporte, es muy importante en todos los niños y jóvenes, pero en el niño o joven ciego y deficiente visual tiene una vital importancia, ya que mediante él aprende a coordinar todas las partes de su cuerpo, se interrelaciona con los demás compañeros formando así un grupo para crear lazos de unión socio-afectivos y, a la vez, fomentar la imaginación, aprender a crear y a respetar las reglas, valores importantísimos para el desarrollo global del niño y que mediante el juego o el deporte aprenden de una forma amena y divertida.
En tal sentido el profesor Roldán expresó que “el deporte, ya sea de base o de competición, conlleva una serie de objetivos tales como el aprovechamiento en forma lúdica y sana del tiempo libre y evitar el sedentarismo, tan común en las personas ciegas. También remarcó que es importante fomentar las relaciones interpersonales a través del deporte de grupos y desarrollar la autoestima y superación personal”.