El vicegobernador bonaerense, Gabriel Mariotto, afirmó hoy que “no queda claro que haya sido al voleo” el robo que sufrió su familia en la ciudad de Lomas de Zamora, al sur del Conurbano, donde los ladrones quisieron llevarse cautiva a su esposa pero ella se resistió.
Por este episodio, que calificó de “traumático”, el funcionario admitió que tendrá que “extremar las medidas de seguridad”, ya que se movilizan sin custodia tanto él como su mujer. “Hicimos una exposición. Ahora vamos a ratificar la denuncia porque no nos queda claro si fue un robo al voleo o un robo premeditado”, afirmó el vicegobernador.
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El vicegobernador bonaerense, Gabriel Mariotto, afirmó hoy que “no queda claro que haya sido al voleo” el robo que sufrió su familia en la ciudad de Lomas de Zamora, al sur del Conurbano, donde los ladrones quisieron llevarse cautiva a su esposa pero ella se resistió.
Por este episodio, que calificó de “traumático”, el funcionario admitió que tendrá que “extremar las medidas de seguridad”, ya que se movilizan sin custodia tanto él como su mujer. “Hicimos una exposición. Ahora vamos a ratificar la denuncia porque no nos queda claro si fue un robo al voleo o un robo premeditado”, afirmó el vicegobernador.
Fuentes policiales informaron que el hecho ocurrió anoche, alrededor de las 23, en la calle Laureano Oliver al 1400. Al menos dos ladrones interceptaron a una camioneta Dodge RAM en la que viajaban Gabriela Mendeguía, esposa de Mariotto, junto a su hijo de 15 años, su madre y la sobrina, de 16, que había llegado de Mar del Plata para hacerse estudios médicos por una enfermedad que padece.
“La querían llevar”, pero hubo un forcejeo y los asaltantes escaparon con el vehículo y un Volkswagen Gol en el que habían llegado, dijo el vicegobernador sobre su mujer.
“Había un auto esperando, cuando están descendiendo le cruzan el auto y bajaron mi nene, mi suegra, mi sobrina y quedó mi esposa en el auto”, aseveró el funcionario.
Luego acotó: “Intentaron llevársela (a su mujer), pero por suerte pudo bajar. Se llevaron el auto con la cartera y esas cosas. Fue un episodio de disgusto, pero por suerte los cuatro quedaron bien”, remarcó Mariotto, quien reveló que en la esquina de su casa tiene custodia de la Gendarmería Nacional.
Según Mariotto, esa guardia de la fuerza de seguridad se debe a cuando dio impulso a la comisión investigadora en el Senado bonaerense en el marco del caso de Candela Rodríguez, la niña de 11 años que fue secuestrada y posteriormente asesinada en agosto de 2011 en el partido en Hurlingham. “Tengo en la esquina de mi casa un móvil de Gendarmería desde que votamos la Comisión del caso Candela, donde se pidió la separación del cargo de 40 policías de alto rango”, expresó.
Mariotto dijo que siempre hay un “móvil de la Gendarmería”, pero él y su familia se manejan sin custodia. “El episodio Candela, la acción que hicimos desde el Senado de la provincia de Buenos Aires, que fue muy fuerte, me llevó a tomar el resguardo de tener Gendarmería, sobre todo para custodiar la familia, que está todo el día en casa, yo estoy muy poquito tiempo, me voy muy temprano a la mañana”, acotó.
El vicegobernador bonaerense subrayó que tiene “prácticas culturales normales de hombre común. Estamos expuestos a cualquier tipo de manifestaciones que ocurren en la calle”, recalcó al respecto.
Mariotto enfatizó que radicó la denuncia y se mostró confiado en que “la Justicia actúe, porque no queda claro que haya sido un robo al voleo, porque había un auto estacionado y cuando se bajan les cruzan ese auto”.
Al ser consultado si la inseguridad es un tema de la agenda de la política, Mariotto respondió: “Por supuesto, lo estamos abordando en la provincia con mucha responsabilidad. Hay un abanico de leyes que hemos tratado en materia de seguridad y justicia. Por supuesto que es un tema que nos preocupa muchísimo. También es mucho lo que estamos haciendo y mucho lo que falta”, finalizó.