Martín Aguirre y Angel Martínez llegaron felices a la planta editorial de El Tribuno desde Cachi y desde Tartagal. Y no era para menos: cada uno ganó $23.000 con el Cartonazo que la semana anterior puso en juego un tentador pozo de $50.000.
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Martín Aguirre y Angel Martínez llegaron felices a la planta editorial de El Tribuno desde Cachi y desde Tartagal. Y no era para menos: cada uno ganó $23.000 con el Cartonazo que la semana anterior puso en juego un tentador pozo de $50.000.
Entre los dos se repartieron la mayor parte del premio mayor. El resto del dinero se lo llevaron otros ocho lectores del diario, a razón de $500 cada uno por haber completado una línea.
“No, no le voy a decir, lo voy a hacer con la plata”, dijo, sin desvíos, Martín. Aunque luego, con la charla más animada, confesó que la usará para hacer algo con la tierra que tiene en Cachi, donde trabaja cultivando tomates, cebolla y haciendo pimiento para pimentón. Para lo que no tuvo reparos es para adelantar que invertirá algunos billetes para festejar con su grupo de amigos el Día del Trabajador.
Angel es un tipo tranquilo. Wilma, su esposa desde hace más de 30 años, es su lado opuesto y la que apuraba la charla con El Tribuno. Viven solos en Villa Saavedra, uno de los barrios más conocidos de Tartagal, porque sus dos hijos están en Córdoba y en Buenos Aires.
Los $23.000 que ganaron ya tienen destino: cambiarán el auto que Angel usa de remise, oficio que adoptó hace ya varios años. “Nos vino justo. Nuestra costumbre es cambiar el auto cada tres años y ahora lo podemos hacer. La casa seguirá esperando”, contó ella, quien espera un buen regalo porque mañana cumple años.