Salió a pedido de la Presidenta. Anoche el Senado de la Nación, con el voto de la mayoría kirchnerista y el de los radicales, dio media sanción al proyecto de ley para abrir por tercera vez el canje de deuda. Ahora el proyecto pasará a la Cámara de Diputados para su aprobación definitiva. Fueron 57 votos afirmativos, 8 negativos y una abstención.
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Salió a pedido de la Presidenta. Anoche el Senado de la Nación, con el voto de la mayoría kirchnerista y el de los radicales, dio media sanción al proyecto de ley para abrir por tercera vez el canje de deuda. Ahora el proyecto pasará a la Cámara de Diputados para su aprobación definitiva. Fueron 57 votos afirmativos, 8 negativos y una abstención.
Durante la sesión, que duró cinco horas, se escucharon fuertes discursos de los bloques opositores, que pusieron en evidencia las falencias de las negociaciones con los llamados fondos buitre y durante el proceso judicial en Nueva York que terminó con un fallo adverso al país.
Tras la aprobación en general del proyecto, los senadores radicales intentaron modificarlo durante la votación en particular, pero esto fue rechazado por los kirchneristas.
Los radicales proponían derogar la “ley cerrojo” y fijar la jurisdicción de pago de los bonos.
Durante la sesión, el oficialista Aníbal Fernández, titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, ratificó que el objetivo de esta nueva apertura del canje es que “se presente aquel 7 por ciento de los bonistas que no se presentó en 2005 y 2010, sosteniendo un trato equitativo con el resto de los tenedores”.
Sobre los llamados “fondos buitre”, Fernández remarcó que la demanda en los tribunales estadounidenses contra la Argentina proviene de “tenedores de títulos que en su inmensa mayoría los compraron con el único objeto de demandar”.
En este sentido, puso como ejemplo al fondo Elliott Associates, que “compró 400 millones de dólares en 40 millones y pretende cobrar 700 millones, 1.400 por ciento más”.
Por su parte, la radical Laura Montero habló en calidad de presidenta de la Comisión de Economía Nacional y reconoció que el apoyo de la UCR a la reapertura del canje “no fue un tema sencillo”.
“Lo que primó fue hacer una abstracción del contexto político y electoral, en un marco en el que creemos que hay una transición hacia 2015 que es muy complicada”, agregó Montero.
No obstante, su compañero de bloque Mario Cimadevilla evaluó que “la respuesta de los fondos buitre va a ser la misma que ha sido hasta ahora”.
En tanto, los senadores del Peronismo Federal Juan Carlos Romero y Sonia Escudero se pronunciaron en contra del proyecto tras considerar que “el desendeudamiento es una falacia” y que la “estrategia del pago de deuda fue entorpecida por las declaraciones del Gobierno”.
Condiciones
El proyecto establece que “los términos y condiciones que se ofrezcan” en este tercer canje “no podrán ser mejores que los ofrecidos a los acreedores en la reestructuración de deuda de 2010”.
Según el artículo 4, los que participaron del canje de 2005 y quieran ingresar a este “deberán renunciar a todos los derechos que le correspondan en virtud de los referidos títulos, inclusive a aquellos derechos que hubieran sido reconocidos por cualquier sentencia judicial o administrativa, laudo arbitral”.
También deberán “liberar a la República Argentina de cualquier acción judicial, administrativa arbitral o de cualquier tipo iniciada o que pudiere iniciarse en el futuro con relación a los referidos títulos”, incluyendo “cualquier acción destinada a percibir servicios de capital o intereses”. El artículo prohíbe “ofrecer a los tenedores de deuda pública que hubieran iniciado acciones judiciales, administrativas, arbitrales o de otro tipo un trato más favorable que aquellos que no lo hubiera hecho”.
El artículo 6 del proyecto señala que “los bonos del Estado nacional cuyos titulares no hubieren adherido al canje” de 2005 y 2010 “o no hubieren manifestado su voluntad de no adherir a los mismos, quedarán reemplazados, de pleno derecho, por los Bonos de la República Argentina a la par en pesos "step up' 2038”.
Los “step up” son títulos que se caracterizan por un pago de cupón cuyos intereses se van incrementando a través del tiempo. El proyecto no específica cómo será esa variación, sino que el Ministerio de Economía “dictará las normas complementarias” para ese cambio de bonos.
Las opiniones
“No hay desendeudamiento, eso es un slogan, un cartel, un relato, porque pasar de una deuda de 193 mil millones de dólares de antes del primer canje a una deuda actual de 197 mil millones de dólares muestra que la deuda es similar, por lo tanto hablar de desendeudamiento es un chiste”, dijo. “Este despilfarro (de las cuentas públicas), este déficit fiscal, provoca inflación; por ende, quien provoca inflación es el Gobierno nacional que nos ha puesto al borde de otra sentencia en contra. A la deuda hay que agregar la que no se contabiliza y que ronda 45 mil millones más, porque no está aquí el Club de París, ni los que no entraron al canje, ni el Ciadi. Tampoco está la deuda en pesos, por el enorme gasto público que pasó de 121 mil millones a 628 mil millones”. Juan Carlos Romero, Peronismo Federal.