Con la mira puesta en el 2015 y sin sorpresas, el PJ formalizó ayer su conducción partidaria. Eduardo Fellner, el mandatario jujeño, será el presidente de este nuevo proceso del justicialismo a nivel nacional, que está plagado de dirigentes kirchneristas y deja afuera a todos los peronistas opositores. Jorge Capitanich, Antonio Caló, Beatriz Rojkés y Eduardo “Wado” de Pedro serán quienes ocupen de la primera a la cuarta vicepresidencia, respectivamente. Entre las definiciones más tajantes que dejó el encuentro, el PJ no apoyará las modificaciones a las PASO planteadas por el PRO.
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Con la mira puesta en el 2015 y sin sorpresas, el PJ formalizó ayer su conducción partidaria. Eduardo Fellner, el mandatario jujeño, será el presidente de este nuevo proceso del justicialismo a nivel nacional, que está plagado de dirigentes kirchneristas y deja afuera a todos los peronistas opositores. Jorge Capitanich, Antonio Caló, Beatriz Rojkés y Eduardo “Wado” de Pedro serán quienes ocupen de la primera a la cuarta vicepresidencia, respectivamente. Entre las definiciones más tajantes que dejó el encuentro, el PJ no apoyará las modificaciones a las PASO planteadas por el PRO.
Más de 900 representantes de todo el país debatieron la nueva cúpula nacional tras intensas negociaciones en todo el país. En cierta medida, el kirchnerismo logró normalizar institucionalmente al partido. Pero no avanzó en la posibilidad de abrazar a sectores justicialistas que hoy no comulgan con el kirchnerismo.
Quienes ocuparán las vicepresidencias reflejan el apoyo a la Presidenta. El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, expuesto a niveles elevados y hoy ya lejos de sonar como “presidenciable”, se quedó con la vicepresidencia primera, como premio consuelo. La obediencia del líder de la CGT oficial, Antonio Caló, fue más que reconocida y el metalúrgico se quedó con la vicepresidencia segunda. De reconocida amistad con la jefa de Estado y con un peso importante entre los mandatarios del interior, Beatriz Rojkés de Alperovich se convirtió en la vicepresidenta tercera en el justicialismo nacional.
La fidelidad de La Cámpora también fue premiada. Uno de sus máximos exponentes, Eduardo “Wado” de Pedro ocupará el cuarto y último lugar en la vicepresidencia.
Un mensaje claro
La normalización del PJ no sirvió más que para aglutinar al kirchnerismo y sectores afines a él.
Así lo dejó en claro su flamante titular, el gobernador Eduardo Fellner. Al término del acto, Fellner instó a “apoyar al Gobierno nacional” y a “preparar” al peronismo para seguir gobernando a partir de 2015.
Además, calificó a la oposición como un “rejunte de voluntades que esperan aprovechar una oportunidad”.
En la formalización de la conducción partidaria también hubo un lugar para los presidenciables. Es que con el objetivo de permanecer neutrales hasta nuevo aviso en el PJ optaron por poner en el mismo lugar de salida a los dirigentes que ya expresaron sus intenciones de ser futuros sucesores de Cristina Fernández de Kirchner.
Fueron designados vicepresidentes honorarios el presidente de la Cámara de diputados, Julián Domínguez; el senador Aníbal Fernández; los ministros de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, y de Defensa, Agustín Rossi, y los gobernadores Daniel Scioli, Sergio Urribarri y Juan Manuel Urtubey.
Una reunión plagada de ausencias trascendentes
Los peronistas que hoy no se identifican con las banderas del kirchnerismo fueron los grandes ausentes en el Congreso Nacional en Buenos Aires.
Pese a que la “unidad” era el consigna central, varios son los congresales que pegaron el faltazo dejando un encuentro solo para los peronistas alineados o cercanos a la Casa Rosada.
Los gobernadores José Manuel De la Sota (Córdoba), Daniel Peralta (Santa Cruz), Claudio Poggi (San Luis), el senador salteño Juan Carlos Romero fueron los grandes ausentes y el exgobernador de Santa Fe Carlos Reutemann.
“Para qué voy a ir si mi provincia es discriminada por el Gobierno nacional, yo sigo defendiendo a mi provincia”, señaló De la Sota tras acusar al kirchnerista de “no ser un gobierno peronista”.
“Para que no quede ninguna duda. No concurriré al Congreso del PJ del próximo viernes en Parque Norte. Mi compromiso con la gente va mas allá” había adelanto en su cuenta oficial de Twitter, el senador nacional, Juan Carlos Romero.
El gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, también había avisado que ni él ni la mayoría de los congresales de su provincia viajarán a Buenos Aires. Aunque eran apenas nueve, tienen un peso simbólico por ser la cuna del kirchnerismo.
Por otra parte, consultado al respecto, el santafesino Agustín Rossi reconoció que “hay algunos peronistas medio extraños” (como los sindicalistas Luis Barrionuevo y Hugo Moyano, críticos a la administración de la Presidenta). Sin embargo advirtió que “el peronismo tiene que apoyar este proceso de transformación”.
Fellner: “No habrá ninguna modificación”
El flamante presidente del PJ, Eduardo Fellner, aseguró que el partido no va a acompañar “ninguna modificación de las PASO”, una idea reclamada por la oposición pero también manejada en algún sector del peronismo.
“Hay una ley vigente que debe cumplirse”, dijo el jujeño, en línea con las declaraciones que hizo ayer Miguel Pichetto.
Cabe recordar que el jueves, los diputados nacionales del PRO presentaron un proyecto de ley para que el candidato a presidente que surja de las PASO pueda elegir a su compañero de fórmula.
La intención del macrismo es que el ganador pueda ofrecer al perdedor ese cargo y no arriesgar una evaporación de apoyos.
De acuerdo a trascendidos el proyecto gusta en toda la oposición, que cree que favorece así la cohesión de alianzas que tienen más de oportunidad que de convicción.
Sin embargo, con el eventual rechazo del oficialismo, el proyecto no avanzaría.