El IV Congreso Latinoamericano de Transporte con Cable que se realiza en Salta aportó dos posibilidades que no estaban en la agenda pública: dos empresas le propusieron al gobernador Juan Manuel Urtubey la extensión del teleférico, con nueva tecnología, desde la cumbre del cerro San Bernardo hasta la del cerro Ala Delta, un kilómetro al este. Al mismo tiempo, se proyecta la posibilidad de incorporar el transporte urbano por cables aéreos, como un plan de largo plazo.
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El IV Congreso Latinoamericano de Transporte con Cable que se realiza en Salta aportó dos posibilidades que no estaban en la agenda pública: dos empresas le propusieron al gobernador Juan Manuel Urtubey la extensión del teleférico, con nueva tecnología, desde la cumbre del cerro San Bernardo hasta la del cerro Ala Delta, un kilómetro al este. Al mismo tiempo, se proyecta la posibilidad de incorporar el transporte urbano por cables aéreos, como un plan de largo plazo.
El gobernador presidió la apertura de las deliberaciones, en el hotel Alejandro I, acompañado por el ministro de Cultura, Turismo y Deportes, Juan Manuel Lavallén, y el administrador del Complejo Teleférico San Bernardo, Martín Miranda.
Entre los empresarios de transporte de cable se encontraban Lorens Mehl y Daniel Lewynsky, de la empresa Doppelmayr, y Renaud Gorria y Paulo Muñoz,, directivos de la empresa Poma.
Los cuatro ejecutivos se reunieron con el jefe de Gabinete de Ministros, Fernando Yarade, para analizar las posibilidades de introducir una modernización global del teleférico, que en pocos días cumplirá 31 años en funcionamiento.
No se dieron a conocer números pero, según las autoridades provinciales, "los costos serían manejables, el impacto ambiental acorde con la normativa actual, con menos columnas y más capacidad de carga, además de potenciar el atractivo turístico y ser financieramente sustentable".
Una experiencia extraordinaria
Martín Miranda habló sobre el Teleférico Salta como modelo de sociedad del Estado en acción. El funcionario describió las mejoras que se vienen desarrollando en la cumbre del cerro San Bernardo y aseguró que la ampliación hasta el cerro Ala Delta redimensionará "esta extraordinaria experiencia de más de tres décadas".
La idea consiste en desarrollar en la cumbre del Ala Delta actividades recreativas, deportivas y turísticas, incluida alguna variante de montañismo.
El grupo Doppelmayr Garaventa es una empresa suizo-austríaca que fabrica telesillas, teleféricos, góndolas, remolques de superficie para parques de atracciones y de esquí, así como transportadores urbanos y sistemas de manejo de materiales.
Especializada en transporte por cable, Poma lleva más de 80 años operando en los cinco continentes; ha construido más de 8.000 instalaciones en más de 80 países, que suman una capacidad total de transporte de 6 millones y medio de personas cada hora.
Ayer presentaron algunas propuestas concretas, económicas y técnicas que serán evaluadas para iniciar un proceso licitatorio.
Más que turismo
El congreso, organizado por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial, se enfoca en las nuevas tecnologías, modalidades de trabajo y proyectos y se extenderá hasta mañana.
Si bien los teleféricos y cablecarriles se asocian con el turismo, en Europa se expanden como medio de transporte urbano. En Bolivia, Venezuela, Brasil, Chile y Colombia ya existen proyectos de este tipo.
Existen expectativas de avanzar, a muy largo plazo, en este sistema de transporte en Salta.
Hoy se ha popularizado, traslada a millones de personas, es económico y resuelve el traslado en geografías agrestes.
Urtubey resaltó la posibilidad de que empresarios y representantes del sector puedan mirar al norte del país, "hacia una provincia en franco crecimiento que apuesta al turismo. Salta apunta siempre a fortalecer su oferta turística y, en este marco, también queremos modernizar nuestro teleférico, por eso agradecemos esta oportunidad y el aporte que puede surgir con los mejores proveedores del mundo, para un mayor desarrollo de nuestro complejo".
La obra de un visionario
El teleférico es una obra turística del gobierno de Roberto Romero, a la que el tiempo consagró como un acierto incuestionable.
En ese momento Salta comenzaba a ubicarse en el centro del desarrollo regional y como receptora de turismo externo y distribuidora entre los destinos de la provincia y de Jujuy.
El sistema fue concebido para retener, entonces, medio día más a los visitantes y como una forma espectacular de “city tour”.
Junto con el teleférico se desarrolló una infraestructura espectacular en la cumbre y se confiaba en que esta se transformara en un centro de recreación y celebraciones.
La escalera de casi 1.100 escalones y la pavimentación de la ruta de acceso complementaron la iniciativa. Hoy, extender el cable hasta la cumbre cercana, que de concretarse incluirá otros “aggiornamientos”, podría convertir a ese enorme espacio verde en un nucleo turístico, deportivo y recreativo muy similar al que se concibió en el proyecto original de 1987.