Claudio Farana aún no sale de su asombro y bronca. Delincuentes carnearon una de sus vacas, y no cualquiera. Una Brangus valuada en 500.000 pesos que había salido campeona el año pasado en la Exposición Rural de Resistencia y estada pregnada.
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Claudio Farana aún no sale de su asombro y bronca. Delincuentes carnearon una de sus vacas, y no cualquiera. Una Brangus valuada en 500.000 pesos que había salido campeona el año pasado en la Exposición Rural de Resistencia y estada pregnada.
El hecho ocurrió en un campo ubicado a unos 17 kilómetros de la localidad chaqueña de General San Martín. “En lo que va del año hubo 59 denuncias a la policía local. Pero nada”, dijo el periodista especializado Matías Longoni, que difundió el caso en su cuenta de Twitter.
“Me dolió muchísimo, porque era una vaca de pedigree”, se lamentó Farana en diálogo con el diario La Nación. Del imponente animal sólo quedaron las patas, el cuero y la cabeza. También yacía en el piso su ternero muerto, aún con el cordón umbilical.
“Tenía mucho valor, y más que eso, me duele porque es el trabajo de muchos años para llegar a un animal de esas características”, se lamentó el hombre. “Soy el dueño de una empresa familiar, es un campo chico y tratamos de producir lo mejor posible”, continuó.
Según la la Federación Chaqueña de Sociedades Rurales (Fechasoru), en lo que va del año hubo más de 60 casos en 200 kilómetros a la redonda, que representan más de 1.500.000 de pesos de pérdida para los productores, que muchas veces no realizan la denuncia.
“La policía trata de andar y hace lo que puede, pero el departamento es muy grande y tiene pocos móviles. Es lamentable que cuando la policía atrapa a uno de los cuatreros con carne la Justicia los libere”, consideró Farana.
Ángel Alvarenga, jefe del departamento de Seguridad Rural de la zona interior General San Martín, precisó que de las 60 denuncias que recibieron, 34 fueron por hurto y abigeato de animales vacunos y que se se recuperaron 40 animales y al menos 10 casos fueron esclarecidos.