El caso Daniel Solano sigue generando demanda de justicia. Se trata de la causa del trabajador golondrina tartagalense asesinado en Choele Choel, provincia de Río Negro, tras reclamar mejores condiciones laborales.
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El caso Daniel Solano sigue generando demanda de justicia. Se trata de la causa del trabajador golondrina tartagalense asesinado en Choele Choel, provincia de Río Negro, tras reclamar mejores condiciones laborales.
La saga judicial de casi 9 años comenzó la madrugada del 5 de noviembre de 2011, cuando 11 policías provinciales sacaron al salteño de un boliche y nunca más se supo nada de él. Hasta hoy sus restos no fueron hallados.
Por el caso fueron condenados a perpetua siete policías, en agosto de 2018. El abogado que representa a la familia Solano, Sergio Heredia, siempre dijo que eran más los efectivos que participaron del secuestro y desaparición del joven. Ahora, la Justicia avanza en ese sentido.
Fue el mismo abogado quien dio la novedad sobre el inicio de juicio oral y público para tres policías más, por ser "partícipes necesarios del asesinato de Daniel Solano".
Se trata de Cristian Toledo, Ceferino Muñoz y Walter Etchegaray, quienes estaban trabajando en la seguridad del boliche Macuba, la noche en que Daniel Solano desapareció de ahí.
"Nosotros a los pocos días que arribamos a Choele denunciamos a cuarenta y pico de personas que consideramos responsables de este asesinato, además de los siete autores materiales que fueron condenados el año pasado", dijo Sergio Heredia en diálogo con Radio FM Encuentro, de la comarca del Valle Inferior del Río Negro.
"Ahora nos llegó la notificación para ratificar la querella en la audiencia de imputación de tres policías que son Cristian Toledo, Ceferino Muñoz y Walter Etchegaray, que eran quienes estaban de adicionales la noche que desaparece Daniel Solano".
El abogado consideró: "Es una vergenza que se haya demorado tanto tiempo, nosotros ya hicimos el requerimiento a juicio en su momento. Estos tres policías debieron haber sido juzgados junto a los otros siete, y el octavo asesino que es Tomás Vega".
Heredia detalló: "Obviamente que nosotros los vamos a acusar de partícipes necesarios de homicidio, por lo tanto es muy posible que sean condenados a cadena perpetua, porque ya fueron condenados los que participaron con ellos".
"Los siete condenados no podrían haber ejecutado el homicidio si no hubiera sido por la participación activa de estos policías. Es más, Etchegaray es uno de los que los golpea a Solano, eso quedó probado en el juicio", dijo.
La historia
Solano tenía 27 años en octubre de 2011 cuando viajó con un grupo de jóvenes desde Misión Cherenta a Río Negro para trabajar en tareas rurales.
El 5 de noviembre de ese año fue a un boliche de Choele Choel, de donde se lo llevaron varios policías de acuerdo al relato de testigos. Nunca se volvió a saber de él pese a los reclamos de su familia.
Lo que se pudo reconstruir es que el joven estaba disconforme con las condiciones laborales. Intentaba organizar una protesta contra la empresa Expofrut, del grupo belga Univeg.
En 2015, un testigo de identidad reservada declaró que los restos del joven habrían sido arrojados en lo que se conoce como El Jagel, un pozo profundo en un campo cercano a Choele Choel. El año pasado se hicieron excavaciones en el lugar, pero no se encontró nada. La familia de Daniel Solano sigue pidiendo que busquen sus restos para llevarlos a Tartagal.