Fue una hazaña en el techo de América: un helicóptero bimotor aterrizó por primera vez en la cima del Aconcagua. Esto, tiene un gran valor hacia adelante: representa la posibilidad de llegar a lo más alto del cerro para realizar los rescates más complejos, en condiciones de extrema contingencia climática.
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Fue una hazaña en el techo de América: un helicóptero bimotor aterrizó por primera vez en la cima del Aconcagua. Esto, tiene un gran valor hacia adelante: representa la posibilidad de llegar a lo más alto del cerro para realizar los rescates más complejos, en condiciones de extrema contingencia climática.
Por tal motivo, en la provincia celebran este logro de una empresa privada, a la que le brindaron toda la asistencia para concretar el objetivo. Se trata de la aeronave H145 de la fábrica europea Airbus, que tocó la nieve a 6.962 metros de altura tras un viaje de 15 minutos desde la base operativa del cerro. Previamente, realizó un trayecto de media hora desde el aeropuerto provincial.
Fue una verdadera celebración en el momento en que se posó la nave sobre el Coloso del continente. El piloto de pruebas Alexander Neuhaus, junto con el ingeniero Antoine van Gent, se mostraron orgullosos del hito.
"Nos mantuvimos muy concentrados por los fuertes vientos, turbulencias y con una densidad muy baja de aire. Pero, por las cualidades del nuevo helicóptero, pudimos alcanzar la cima de forma segura. Sobrevolamos la zona sin utilizar toda la potencia, lo que nos habría permitido transportar dos pasajeros", indicó Neuhaus.
El vuelo fue posible gracias a la colaboración de las fuerzas provinciales y nacionales. Así, participaron de la expedición aérea la Fuerza Aérea Argentina, con helicópteros Lama, la Patrulla de Rescate de Alta Montaña de la Policía de Mendoza, personal del Parque Provincial Aconcagua y la firma local Helicopters AR, con su helicóptero de un solo motor, el Airbus H125.
Cómo era hasta ahora
Esta misión representa una oportunidad para lo que viene en el Parque Aconcagua, ya que se podrá aumentar la carga a la hora de concretar un rescate. Hasta ahora los operativos, en promedio unos 200 por año, se venían realizando con naves de un solo motor.
"Colaboramos con la seguridad, con personal en apresto ante la imposibilidad de que la nave no pudiera salir, tras permanecer dos minutos. Afortunadamente salió todo bien.