Un nuevo crimen sacude al país. Dos hombres fueron demorados ayer en el marco de la investigación por el asesinato de un niño de cuatro años y la violación a su madre, ambos salteños, en Puerto Deseado. La mujer paseaba frente al mar en esa localidad de Santa Cruz con su hijo cuando la interceptaron dos hombres que la llevaron a una cueva para abusar sexualmente de ella. Luego mataron a su hijo y a ella la dejaron, creyendo que estaba muerta.
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Un nuevo crimen sacude al país. Dos hombres fueron demorados ayer en el marco de la investigación por el asesinato de un niño de cuatro años y la violación a su madre, ambos salteños, en Puerto Deseado. La mujer paseaba frente al mar en esa localidad de Santa Cruz con su hijo cuando la interceptaron dos hombres que la llevaron a una cueva para abusar sexualmente de ella. Luego mataron a su hijo y a ella la dejaron, creyendo que estaba muerta.
La mujer y el niño, de Rosario de la Frontera, estaban de visita en esa localidad de Santa Cruz, donde está radicado el hijo mayor de la familia.
El niño fue asesinado a golpes y su madre fue abusada, además de sufrir cortes en el cuero cabelludo y en el cuerpo.
El hecho ocurrió cerca de las 16 del jueves y provocó gran conmoción en todo el país. Según los investigadores, todo ocurrió cuando la mujer, que vive en Rosario de la Frontera, caminaba con su hijo por la playa Cavendish, ubicada a poco más de un kilómetro del centro de la localidad balnearia de Puerto Deseado.
De acuerdo a los datos que pudo aportar la víctima a la Policía, en ese momento fueron sorprendidos por dos hombres que los amenazaron, la obligaron a caminar hasta una cueva, ya que el lugar está rodeado de acantilados, y luego la atacaron con el objetivo de abusar sexualmente de ella.
Según lo que relató, en medio del ataque sexual y mientras uno de los agresores amenazaba a su hijo con un cuchillo, la mujer se desvaneció, por lo que los delincuentes, al creerla muerta, se llevaron al chico, a quien finalmente asesinaron a golpes y dejaron abandonado su cadáver en la misma zona, a pocos metros de donde se hallaba su madre.
Una testigo relató que minutos más tarde auxilió a la mujer, que se les apareció descalza y totalmente ensangrentada, cuando se ella estaba paseando por el autódromo de la zona.
"Nos encontrábamos en el autódromo Ramonín Fernández y cuando estábamos por irnos vimos a una persona ensangrentada entrando al SUM, nos pegamos un susto bárbaro, estaba bañada en sangre y sin calzado, pidiendo auxilio", relató Cecilia Oyarzo.
La testigo dijo que le dieron un vaso de agua y la contuvieron hasta que llegó la Policía, mientras la mujer les contaba que había llegado de Salta "a visitar a su hijo que trabaja en una maderera y que vino con el hijo menor de 4 años, que después nos enteramos que fue asesinado".
"Dijo que el hijo mayor la acercó hasta un paraje que se llama Cavendish, muy rocoso, con paisaje hermoso y que a ella le gusta. El hijo la dejó para que se quede un rato mientras él trabajaba y la abordaron dos hombres con un arma blanca, que la obligaron a mantener relaciones, es decir, la violaron", añadió Oyarzo, quien agregó que la víctima les pedía "por favor" que buscaran a su hijo.
Finalmente, la mujer fue trasladada al hospital en estado de shock, donde permanecía ayer internada pero fuera de peligro.
El cuerpo del niño fue llevado a la morgue judicial de Puerto Deseado donde ayer fue sometido a una autopsia que determinó que falleció como consecuencia de múltiples traumatismos en el cráneo provocados por un objeto contundente.
"En ningún momento hubo una caída de la persona, sino que el lugar donde estimamos (que fue asesinado), de acuerdo a las evidencias que recolectamos hasta ahora y a través de las investigaciones que realizó criminalística, fue a metros de donde se encontró el cuerpo", explicó el ministro de Seguridad de Santa Cruz, Lisandro De La Torre.
Arrestados
Uno de los sospechosos fue detenido en Caleta Olivia y otro, en Puerto Deseado. Los rasgos de ambos aprehendidos coinciden con los identikits realizados ayer por la Policía provincial en base a los dichos la víctima de abuso, aunque se continúa con la búsqueda de pruebas para avanzar en la investigación.
De acuerdo al pedido de difusión pública de los identikits realizado por los investigadores, los acusados del ataque eran dos hombres de "contextura física delgada, estatura baja, aproximadamente 1,60 o 1,65 metros de altura, trigueños, uno de ellos con ojos negros y pelo ondulado".
El requerimiento policial indicaba que cualquier persona que haya visto a dos masculinos con las características mencionadas a las 16 (de ayer) en cercanías de las cuevas de Los Leones, costanera, cementerio, zona de piletones e inmediaciones debía acercarse a la comisaría de Puerto Deseado.
En tanto, fuentes del Ministerio de Seguridad informaron que el sujeto que abusó de la mujer tenía el rostro con cicatrices similares al "acné" y su edad estaría entre los 25 y 30 años.
Además, era de baja estatura, delgado y podía tener lesiones en el rostro o la cabeza por los intentos de la víctima de defenderse.
En tanto, el sujeto que retenía al niño, era de unos 20 años o menos, de similar estatura y contextura física y cabello ondulado. Uno vestía jeans y el otro, joggings. Ambos llevaban un buzo con capucha.
Cómo encontraron a los arrestados
Uno de los dos hombres que quedaron arrestados ayer fue demorado cuando llegaba en un micro a la ciudad de Caleta Olivia.
El otro fue hallado en la zona conocida como “La Favela” en Puerto Deseado, de acuerdo a lo que informaron fuentes del Ministerio de Seguridad de Santa Cruz.
Por otra parte, el esposo de la mujer violada y padre del niño asesinado viajó ayer a la tarde hacia Santa Cruz para acompañar a su esposa.
“Hace un rato pude hablar un poquito porque tampoco puede hablar mucho. Lo único que ella atina a decir es ‘mi bebé, mi bebé’”, expresó el hombre, en un breve contacto con un canal de televisión desde su casa de Rosario de la Frontera.
El hombre, aún conmocionado por lo ocurrido, dijo que estaba “muy dolido” y “sorprendido” por lo sucedido.
También contó que su mujer viajó con el niño el 10 de febrero pasado a Buenos Aires para visitar a una hija que vive allí y que, luego, ambos fueron a Puerto Deseado, donde vive desde hace casi cuatro años otro hijo, que primero se desempeñó en una dependencia del Ejército y que ahora trabaja en una carpintería.