Mientras su tarea es una de las actividades consideradas esenciales para enfrentar la pandemia por el nuevo coronavirus, los médicos y otros profesionales de la salud se organizaron para salir a las calles a reclamar por sus condiciones laborales y salariales.
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Mientras su tarea es una de las actividades consideradas esenciales para enfrentar la pandemia por el nuevo coronavirus, los médicos y otros profesionales de la salud se organizaron para salir a las calles a reclamar por sus condiciones laborales y salariales.
Contratos precarios, sumas fijas pagadas en negro, impuesto a las ganancias y falta de cobro del bono prometido por el Gobierno nacional son algunos de los motivos que los llevarán a marchar.
Hoy, a las 17, cientos de autos se concentrarán en el monumento a Güemes y partirán en caravana por el centro salteño para visibilizar su lucha. Habrá hasta dos personas por auto y todos vestirán guardapolvos y barbijos.
"Ni héroes ni asesinos. Somos médicos" es el lema que eligieron los profesionales de la salud para la protesta. "Decimos basta de maltrato, de culparnos, de amenazas, de precarización laboral. Todos los médicos somos uno", afirmaron desde la organización de la marcha.
Esta semana se organizaron distintas manifestaciones de médicos en el país, a partir la imputación de dos profesionales por los contagios y las muertes por COVID-19 que hubo en un geriátrico de Saldán, en Córdoba.
"Valoren al equipo"
El vicepresidente de la Asociación de Profesionales del Hospital Público Materno Infantil (Aspromin) y secretario gremial de la Interhospitalaria, Justino Ustárez, explicó que este es un momento muy especial para los médicos, que trabajan con el riesgo de contraer el nuevo coronavirus y llevarlo a sus casas.
"Les pedimos que valoren al equipo de salud. Pasamos momentos muy difíciles", confesó el médico.
Contó que muchas veces sufren situaciones de discriminación y mencionó el caso de una médica que tuvo que irse del supermercado porque la trataron mal.
El hombre se solidarizó con los profesionales que trabajan en los hospitales de Joaquín V. González, de Orán, de General Güemes, del Papa Francisco y del Señor Del Milagro, quienes reclamaron por las condiciones de trabajo.
Ustarez reveló que se está gestando la conformación de un gremio médico. A pesar de los temores y de las presiones que sufren, buscarán organizarse para dar fuerza a los planteos laborales y salariales.
Según mencionó, algunas de las demandas que tienen desde Aspromin son el cobro del bono de 30 mil pesos prometido por Nación, el cese del pago de Ganancias y el pase a planta de personas contratadas y con designaciones temporarias.
Piden no a la precarización laboral, reapertura de paritarias, no a la suma fija en negro, testeo masivo para el personal de salud, comité de crisis con representación de los trabajadores, jubilación con el 82 por ciento móvil y jerarquización de los médicos en los equipos de salud.
Lo que pasó en Córdoba
Hace una semana, la Unidad Fiscal de Emergencia Sanitaria (UFES) de Córdoba imputó a dos médicos por los contagios de coronavirus que se registraron en un geriátrico de Saldán, provincia de Córdoba. Se trata del médico Lucas Figueroa y del director médico de la residencia geriátrica Santa Lucía, Marcelo Santiago Lazaro.
Ambos fueron imputados como responsables de la comisión del delito de "propagación de enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas", previstos en los artículos 45 y 202 del Código Penal. A Lazaro se le sumó el agravante de enfermedad y muerte, en calidad de autor.
El 11 de abril se supo que 27 personas, entre ellas, 21 adultos mayores que vivían en la residencia, se contagiaron coronavirus. El día anterior, se había detectado la enfermedad en un médico que no presentaba síntomas.
Como consecuencia de esto, hubo en total 65 personas infectadas, entre residentes y empleados, y murieron 11 de las 70 personas que vivían allí.
Repudio
Semanas atrás, el Círculo Médico de Salta publicó una solicitada en la que repudió "enérgicamente todo tipo de agresión ya sea física, verbal o cualquier actitud de amedrentamiento; en especial contra los integrantes del equipo de salud".
"La violencia contra los médicos es particularmente irracional, con un impacto grave en toda la sociedad, ya que somos los primeros en asistir al enfermo más aún en contingencia de esta pandemia y a riesgo de nuestra propia integridad", manifestaron.
Desde la entidad expresaron su solidaridad con quienes padecieron agresiones: "La sociedad no es ajena a la creciente escalada de violencia de este tipo".
Desde la delegación provincial del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) aseguraron que en Salta no hubo denuncias de profesionales de la salud por discriminación.