Mientras varias provincias como Salta y Jujuy manejan “con pinzas” el retorno del fútbol, se vislumbra un conflicto.
El Comité Operativo de Emergencia (COE) del Gobierno de Tucumán anunció ayer la ampliación, a partir del próximo lunes, de los deportes habilitados a entrenar al aire libre, incluido el fútbol, lo que supone un posible nuevo frente de conflicto para la AFA, tras lo ocurrido en Mendoza.
Un dato importante es que los entrenamientos se podrán retomar solo en predios, como clubes y complejos deportivos, que estén habilitados por haber cumplido con los protocolos sanitarios del Gobierno provincial, pero no en lugares públicos, como plazas o espacios verdes.
No están limitadas las disciplinas de manera específica, por lo que jugadores y jugadoras de deportes colectivos como el fútbol, rugby y hockey sobre césped, entre otros, podrán retomar la actividad, siempre y cuando cuenten con la autorización de sus respectivas federaciones.
La actividad física se debe desarrollar al aire libre, sin contacto entre los deportistas, por lo que todas las rutinas de entrenamiento deben ser para trabajos individuales.
Por otro lado, los entrenadores y los atletas deberán respetar los protocolos sanitarios de rigor, que incluye aspectos como higiene de manos, distancia interpersonal y especial atención a los posibles síntomas de COVID-19, como la fiebre y la tos.
Incluso, cada deportista debe contar con sus elementos de higiene personal, como toallas, además de su propia botella de agua.
Hasta ahora, en Tucumán, solamente se permitía la actividad física y la práctica de deporte individuales como tenis, golf, ciclismo y moutain bike, entre otras disciplinas.
Con la autorización del COE, planteles profesional de fútbol como Atlético Tucumán y San Martín podrían retomar sus prácticas, pero al igual que ocurrió en Mendoza, la AFA no lo autoriza por interpretar que existe “ventaja deportiva” por sobre aquellas regiones que todavía no pueden entrenarse, como la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense.
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Mientras varias provincias como Salta y Jujuy manejan “con pinzas” el retorno del fútbol, se vislumbra un conflicto.
El Comité Operativo de Emergencia (COE) del Gobierno de Tucumán anunció ayer la ampliación, a partir del próximo lunes, de los deportes habilitados a entrenar al aire libre, incluido el fútbol, lo que supone un posible nuevo frente de conflicto para la AFA, tras lo ocurrido en Mendoza.
Un dato importante es que los entrenamientos se podrán retomar solo en predios, como clubes y complejos deportivos, que estén habilitados por haber cumplido con los protocolos sanitarios del Gobierno provincial, pero no en lugares públicos, como plazas o espacios verdes.
No están limitadas las disciplinas de manera específica, por lo que jugadores y jugadoras de deportes colectivos como el fútbol, rugby y hockey sobre césped, entre otros, podrán retomar la actividad, siempre y cuando cuenten con la autorización de sus respectivas federaciones.
La actividad física se debe desarrollar al aire libre, sin contacto entre los deportistas, por lo que todas las rutinas de entrenamiento deben ser para trabajos individuales.
Por otro lado, los entrenadores y los atletas deberán respetar los protocolos sanitarios de rigor, que incluye aspectos como higiene de manos, distancia interpersonal y especial atención a los posibles síntomas de COVID-19, como la fiebre y la tos.
Incluso, cada deportista debe contar con sus elementos de higiene personal, como toallas, además de su propia botella de agua.
Hasta ahora, en Tucumán, solamente se permitía la actividad física y la práctica de deporte individuales como tenis, golf, ciclismo y moutain bike, entre otras disciplinas.
Con la autorización del COE, planteles profesional de fútbol como Atlético Tucumán y San Martín podrían retomar sus prácticas, pero al igual que ocurrió en Mendoza, la AFA no lo autoriza por interpretar que existe “ventaja deportiva” por sobre aquellas regiones que todavía no pueden entrenarse, como la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense.