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Edad por edad, qué se puede hacer para reducir el riesgo de demencia senil

Un nuevo estudio identificó en total 12 factores que contribuyen a la enfermedad incluso desde la primera infancia. Cuáles son y cómo se los puede evitar.
Domingo, 02 de agosto de 2020 15:45

Modificar 12 factores de riesgo en el transcurso de nuestra vida -desde la infancia hasta la adultez- podría demorar o incluso prevenir la aparición de demencia senil, concluye un informe dirigido por 28 expertos mundiales y publicado en la revista científica The Lancet.

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Modificar 12 factores de riesgo en el transcurso de nuestra vida -desde la infancia hasta la adultez- podría demorar o incluso prevenir la aparición de demencia senil, concluye un informe dirigido por 28 expertos mundiales y publicado en la revista científica The Lancet.

En 2017, la Comisión Lancet ya había identificado nueve factores de riesgo que, a nivel global, contribuyen al 35% de los casos de demencia. Pero los autores estimaron que muchos más casos podrían prevenirse en los países de ingresos bajos y medianos (LMICs, por su sigla en inglés). Dentro de esta categoría están los países de América Latina, donde ese porcentaje asciende al 56%.

“Estas acciones son especialmente importantes en los países de ingresos bajos y medianos, donde las tasas de demencia están creciendo más rápidamente que en los países de altos ingresos. Esto es un resultado del aumento en la esperanza de vida, y una mayor frecuencia de ciertos factores de riesgo”, dicen los autores.

A partir de la evidencia científica actual, a esa lista le sumaron tres nuevos factores modificables, que están vinculados con la ingesta excesiva de alcohol y las lesiones en la cabeza (en la mediana edad) y la exposición a la contaminación del aire (en la adultez). Combinados, se asocian al 6% de los casos de demencia en el mundo.

Por lo tanto, las recomendaciones actuales para prevenir la demencia, dirigidas al común de las personas y también a los gobernantes, abarcan las siguientes 12 acciones:

Edad temprana (menos de 45 años)

• Brindar a todos los niños educación primaria y secundaria. Reduciría un 7% las tasas de demencia.

Mediana edad (de 45 a 65 años)

• Evitar la pérdida auditiva. Proteger los oídos de los altos niveles de ruido y fomentar el uso de audífonos. Reduciría un 8% las tasas de demencia.

• Prevenir las lesiones en la cabeza. Enfocarse especialmente en las ocupaciones y transportes de alto riesgo. Reduciría un 3% las tasas de demencia.

• Evitar la hipertensión. Mantener la presión arterial sistólica en 130 mm Hg o menos. Reduciría un 2% las tasas de demencia.

• Limitar el consumo de alcohol a menos de 21 unidades por semana (cada unidad equivale a entre 8 y 10 gramos de alcohol puro). Reduciría un 1% las tasas de demencia. 

• Evitar la obesidad. Mantener el Indice de Masa Corporal (IMC) por debajo de 30. Reduciría un 1% las tasas de demencia

Edad adulta (mayores de 65 años)

• Dejar de fumar y apoyar a otras personas para que también puedan abandonar el tabaco. Reduciría un 5% las tasas de demencia.

• Prevenir la depresión, ya que está asociada con la incidencia de esta enfermedad. Reduciría un 4% las tasas de demencia.

• Evitar el aislamiento. El contacto social es considerado un factor de protección. Reduciría un 4% las tasas de demencia.

• Mantenerse activo. Hay evidencia de que la actividad física protege contra la enfermedad de Alzheimer. Reduciría un 2% las tasas de demencia.

• Evitar la exposición a la contaminación del aire y al humo de cigarrillo de segunda mano. Reduciría un 2% las tasas de demencia.

• Prevenir la diabetes, ya que se la considera un factor de riesgo. Reduciría un 1% las tasas de demencia.

La buena noticia es que estos 12 factores de riesgo son modificables. “El potencial para prevenir casos de demencia es alto”, dicen los investigadores.

"Nuestro informe muestra que está dentro del poder de los responsables políticos y de las personas prevenir y retrasar una proporción significativa de la demencia, con oportunidades para tener impacto en cada etapa de la vida de una persona", analiza el autor principal, Gill Livingston, profesor del University College de Londres. 

De hecho, en ciertos países, la proporción de personas mayores con demencia ha disminuido, probablemente debido a las mejoras en la educación, nutrición, atención médica y cambios en el estilo de vida. Esto demuestra la posibilidad de reducir la demencia mediante medidas preventivas.

Clarín

 

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