Los corazones de miles de salteños se preparan para vivir una vez más el Milagro y experimentan una mezcla de alegría y tristeza porque este año no podrán peregrinar hacia sus santos patronos, sino que rezarán desde sus casas.
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Los corazones de miles de salteños se preparan para vivir una vez más el Milagro y experimentan una mezcla de alegría y tristeza porque este año no podrán peregrinar hacia sus santos patronos, sino que rezarán desde sus casas.
Cada año, desde los primeros días de septiembre salían grupos de fieles desde los puntos más recónditos de la provincia para llevar sus peticiones y agradecimientos al Señor y la Virgen del Milagro.
Este año, debido a la pandemia de coronavirus, que llegó a la provincia de Salta, cada uno ora desde su casa y prepara el corazón para el Pacto de Fidelidad, que se sellará el martes 15 de septiembre.
Desde Metán, Noemí Cazón contó que cada familia preparó carteles con sus propias oraciones e intenciones. A esta iniciativa se sumó gente de La Candelaria, de Rosario de la Frontera y hasta de Tucumán.
A partir de mañana, colocarán cada uno de estos mensajes a lo largo del camino que recorren año a año sobre la ruta nacional 34 hasta llegar a la Capital.
A cada peregrino le pidieron que prepare una caja con mercadería para donar a una familia que lo necesite, junto a un mensaje lleno de amor y esperanza.
“El sur de Salta sigue caminando al Milagro salteño. Más que nunca, este año no lo vamos a dejar pasar por alto”, expresó.
Desde el norte
Esta mañana, los peregrinos de “Orán camina al Milagro” se conectaron a las 5 para rezar juntos a través del celular y, así, actualizar el inicio de la peregrinación que hacen cada año.
Con el corazón angustiado por la situación que viven a causa de la pandemia, pero con la fe puesta en Dios, Néstor Moldes, pidió al Señor y a la Virgen del Milagro que alejen a esta enfermedad de Salta y del mundo. “Que no haya más infectados ni muertes”, exclamó.