¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

22°
4 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

“Esta temporada mostrará una versión de Luis Miguel más oscura”

Entrevista a Diego Boneta quien protagoniza la serie “Luis Miguel". Este domingo, a las 21, estrenará Netflix su segunda temporada.
Viernes, 16 de abril de 2021 01:54

Diego Boneta protagoniza la serie “Luis Miguel”, que este domingo, a las 21, estrenará Netflix en su segunda temporada. El actor adelantó que esta vez interpretará una versión “más oscura y compleja” del cantante. “Ya no será siempre el héroe de la historia y posiblemente hará entrar en conflicto al público con las decisiones que toma”, dijo.
“En la primera temporada era más una víctima y aquí ya es un adulto que trata de hacer lo mejor que puede con lo que la vida le dio”, contó Boneta, nacido en México hace 30 años.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Diego Boneta protagoniza la serie “Luis Miguel”, que este domingo, a las 21, estrenará Netflix en su segunda temporada. El actor adelantó que esta vez interpretará una versión “más oscura y compleja” del cantante. “Ya no será siempre el héroe de la historia y posiblemente hará entrar en conflicto al público con las decisiones que toma”, dijo.
“En la primera temporada era más una víctima y aquí ya es un adulto que trata de hacer lo mejor que puede con lo que la vida le dio”, contó Boneta, nacido en México hace 30 años.

Después del suceso de 2018, esta segunda temporada revelará, en dos líneas de tiempo que van de la década del 90 a los tempranos 2000, los altibajos que “el Sol de México” enfrentó dentro y fuera de los escenarios en el pico de su éxito.
Después de una primera temporada que devela un camino a la fama de la mano de un padre violento y explotador, los siguientes ocho episodios mostrarán al personaje adulto, menos cándido y más temperamental, atravesando situaciones que podrían ser más propias de un culebrón: la búsqueda atormentada de su madre desaparecida, los entornos nocivos, las amistades oportunistas, los caprichos de la fama y la paternidad.
Al elenco liderado por Boneta se suman Óscar Jaenada, Camila Sodi, los argentinos César Bordón y Macarena Achaga, Fernando Guallar, Pablo Cruz Guerrero, entre otros.

El lema de esta temporada es “Mientras más brilla el sol más oscuras son las sombras”, ¿cómo definirías a la serie?

Tratamos de hacer una temporada que no intente copiar ni recrear la temporada anterior. Esta es otra etapa de la vida de Luis Miguel, entonces es una temporada más oscura, más compleja. Lo que me encanta es que el mismo equipo que hizo la uno está detrás de la dos. Aprendimos mucho de la primera temporada; de entrada nadie en el equipo pensó que iba a tener el éxito que tuvo, entonces para esta temporada pensamos en qué funcionó, qué podemos mejorar. La primera estuvo basada en un libro, la segunda no, entonces tardamos tanto tiempo porque hubo una investigación increíble por parte de los escritores para poder recopilar toda la información sobre Luis Miguel y otras personas clave en esta parte de su vida para esta segunda temporada, y después de obtenerla ver cómo contarla. Y por lo que pasa en la vida de Luis Miguel es una temporada más oscura en todos los sentidos: de personajes, visualmente, y lo que me gusta mucho es que ves a un Luis Miguel totalmente diferente, antes era más una víctima y aquí ya es un adulto. Habrá momentos donde espero que la gente entre en conflicto con las decisiones que él toma y que no siempre sea el héroe de la historia: es un antihéroe que trata de hacer lo mejor que puede con lo que la vida le dio. Al final de cuentas tuvo una vida difícil, no tuvo padres y está tratando de hacer lo que puede con las cartas que la vida le dio.

¿Fue complejo encarnar a un mismo personaje que muestra en ambas temporadas facetas tan distintas?

Totalmente. En esta temporada hay dos líneas temporales y fue como interpretar a dos personajes. Tienes al de los 90, más parecido al que se ve al final de la temporada 1, aunque también es diferente porque ya entra en su época de más éxito, y se da cuenta del poder que tiene, es como el Rey León. Y después para 2005 todavía el Rey León pero con cicatrices, un poco más lastimado. Crear ambos personajes, las diferencias entre ambos, fue el reto de esta temporada, mucho más grande que el de la primera porque no había día que no me tocaran escenas y muchos días me tocaba salir como ambos personajes. Tuve que tener muy claro los gestos, el cuerpo, los tics de uno y de otro. Para eso, prepararme con mi maestro Juan Carlos Corazza fue esencial para generar esa empatía con el público hasta cuando comete errores, uno dice “ah, es por tal cosa” o por su mamá o su papá. Todo viene desde el amor que no tuvo.

¿Por qué creés que resulta interesante para el público desnudar la fragilidad de un mito?

Puedo decir por qué para mí es interesante. Yo soy fan de Luis Miguel, crecí yendo a conciertos de él, escucho su música y para mí era un artista inalcanzable como ningún otro, nadie sabía nada, era un misterio. Y cuando entré en la serie y fui aprendiendo más sobre su vida, entendí lo que le pasó a este hombre. Nada más la vida que tuvo sin ser Luis Miguel, todo lo que le pasó, y si a eso le añades que es Luis Miguel, es una locura. Y creo que es muy importante que la audiencia sepa eso porque yo lo empecé a admirar de otra forma, porque me di cuenta de todo lo que sufrió, lo que vivió, lo que tuvo que pasar y genera empatía la persona, el ser humano. Y ver a alguien tan grande vulnerable, creo que es esencial para lograr esa empatía.

¿Es complejo equilibrar el límite entre el amarillismo y contar una historia tan compleja? ¿Cuál es el secreto para no cruzarlo?

El equipo creativo detrás de la serie, sobre todo el director y escritor de la serie que nunca quisieron caer en la caricatura ni en el amarillismo. Siempre verlo desde los ojos del personaje, desde su punto de vista, y de una manera muy aterrizada, muy real, lo más real posible. Creo que eso fue clave y también con Luis Miguel la realidad supera a la ficción con su vida, el estar lo más apegado a lo que sucedió y cómo sucedió porque no te lo crees. Y si a esa combinación, cuentas esas historias de una manera tan aterrizada y tan humana, no cae en esa caricatura ni en el amarillismo, tiene esta onda tan real, orgánica, natural.
 

PUBLICIDAD