El arzobispo de Salta, monseñor Mario Antonio Cargnello, ofreció una invocación religiosa en el acto en conmemoración del 439º aniversario de la fundación de la ciudad de Salta, que se realizó esta mañana en plaza 9 de Julio. Con un discurso acotado, el religioso afirmó que Salta no puede ignorar el compromiso de ser una ciudad que "cultiva la fraternidad".
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El arzobispo de Salta, monseñor Mario Antonio Cargnello, ofreció una invocación religiosa en el acto en conmemoración del 439º aniversario de la fundación de la ciudad de Salta, que se realizó esta mañana en plaza 9 de Julio. Con un discurso acotado, el religioso afirmó que Salta no puede ignorar el compromiso de ser una ciudad que "cultiva la fraternidad".
"Hoy necesitamos asumir el desafío de vencer todo tipo de exclusiones: nos duelen los asentamientos, los barrios poblados por niños sin familias, los jóvenes sin esperanza y ancianos abandonados. Nos duelen los pobres usados con finalidades políticas, los sectores que no pueden alcanzar salud o educación de calidad. Son muchos los ciudadanos que dan lo mejor de sí para enfrentar y superar estas y otras dificultades humanas", expresó la máxima autoridad de la Iglesia salteña.
Monseñor tuvo un momento para agradecer a los médicos, al personal sanitario que diariamente lucha para vencer la pandemia y todo tipo de enfermedad. También agradeció a los maestros y personal de la educación que asumen con responsabilidad su compromiso de formar personas y ciudadanos responsables con clara vocación docente.
"La pandemia profundiza nuestras preguntas y cuestiona la verdad de nuestras afirmaciones, estamos en la misma barca y necesitamos unos a otros", finalizó el arzobispo.