Tres juzgados salteños utilizan las redes sociales Instagram y WhatsApp para comunicarse con los abogados litigantes en los casos en que así se lo amerite, dada la situación sanitaria compleja por la COVID-19.
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Tres juzgados salteños utilizan las redes sociales Instagram y WhatsApp para comunicarse con los abogados litigantes en los casos en que así se lo amerite, dada la situación sanitaria compleja por la COVID-19.
La jueza de primera instancia en lo civil de Personas y Familia 3, Claudia Güemes, contó a El Tribuno que el suyo no es el primer juzgado que tiene Instagram. “Hay otros en diferentes provincias que también lo tienen y ha resultado de mucha utilidad”, agregó.
Sostuvo que en Salta después de mucho tiempo la gente se anima a cambios que otras provincias más progresistas o modernas ya implementaron mucho antes, sin tantos temores.
Reconoció que al principio se cuestionó sobre si el uso de redes para trabajar en el juzgado era adecuado, pero que hoy está convencida de que ha sido una muy buena decisión.
Contó que el año pasado en un montón de ocasiones surgía la necesidad de poder contactarse con las personas litigantes para informarles sobre una acordada, los días y turnos para la atención o la toma de audiencias, pero que no tenían cómo hacerles saber estas cuestiones a las partes.
Solo quienes se conectaban a una plataforma lograban acceder a la información y pudieron concretar las audiencias o acordar trámites y lograron avanzar satisfactoriamente, pero hubo casos en que la falta de comunicación derivó en la reprogramación de audiencias, lo que acarreó dilaciones.
En un momento determinado se cerraron los Tribunales. Ese fue el puntapié para encontrar un canal de comunicación de rápido acceso.
“Si bien el Poder Judicial tiene una página muy buena, cuesta entrar a ella. Las acordadas a veces tienen unas cuantas páginas y sabemos que en este mundo en el que vivimos corriendo si no nos ponen frente a nuestros rostros la información no la vemos”, señaló.
De esta forma, la magistrada adquirió un teléfono celular y se creó el Instagram: juzgadofamilia3salta que actualmente cuenta con 639 seguidores.
Pero posteriormente a la creación de la cuenta, dijeron: “Bueno, no nos quedemos cortos ya que tenemos el celular pongamos un número telefónico y usemos WhatsApp para que por ejemplo los letrados puedan comunicarse ante emergencias o realizar consultas sobre sus expedientes si es que no pudieran hacer los seguimientos desde la plataforma”. La magistrada indicó que “es lo mismo que venga a la mesa de entradas si nos comunicamos por videollamada de WhatsApp porque nos vemos las caras. Si necesito que se identifique le pido que exhiba su carné de abogado y puedo interactuar sin necesidad de desplazamiento”, precisó Güemes. Y añadió: “Hemos completado el Instagram con esto para un mejor servicio. La idea es que la gente pueda tener la respuesta a la que tiene derecho lo más pronto en el tiempo”.
La jueza de primera instancia en lo civil de Personas y Familia 5, Alejandra Diez Barrantes, expresó que la primera jueza en implementar Instagram y WhatsApp en la Provincia, para trabajar, es Claudia Güemes. “Me parece perfecto porque había que buscar todas las maneras posibles de informar a las partes sobre cómo transcurren todos los trámites”, señaló
Añadió que hay mucha gente que navega en internet que permanece bastante tiempo en las redes por lo que le parece oportuno informar mediante las mismas.
“A medida que avanzamos se van mejorando las técnicas digitales. Les damos recomendaciones a los abogados, como por ejemplo, que a la hora del envío armen un solo archivo y no varios”, puntualizó.
Dijo que le parece que son medios perfectos para comunicarse con los abogados. “Utilizamos muchísimo las videollamadas. La cuestión es facilitar el trabajo, que sea efectivo, rápido y se mantenga la buena comunicación con los letrados. El fin es solucionar todos los problemas, que la Justicia no se pare. El objetivo es darle una respuesta positiva a la sociedad. A mí me pareció fantástico”, finalizó la magistrada Diez Barrantes.
En el norte provincial
En tanto, la jueza de primera instancia en lo civil de Personas y Familia 2 del Distrito Judicial Orán, Ana María Carriquiry, es la primera del norte provincial en utilizar las redes.
“Instagram es una red social muy usada por los millennials y los no tan millennials. Hacia ellos nos dirigimos cuando lo creamos. La gente requiere una Justicia cercana y adaptada a ellos que hable su mismo lenguaje”, sostuvo.
Añadió que esta red social es un canal de comunicación ameno en el que la gente puede opinar y consultar sobre el funcionamiento del juzgado. Se comparten fallos destacados del país y del propio juzgado. “Nos dimos cuenta en el contexto de excepción que debíamos estar más conectados con la gente. La tecnología llegó para quedarse por eso celebramos muchas audiencias a través de medios virtuales como la plataforma Meet. Visibilizamos el proceso y utilizamos WhatsApp y Telegram para notificar ciertos actos”, explicó.
Añadió que considera, tal como lo ha planteado en sus fallos, que una democracia abierta requiere la publicidad de sus actos “y este es un buen medio para hacerlo. Los jueces no hablamos solo a través de las sentencias”, culminó la jueza.