Belén Miranda (28), trabajadora social, y Diego Escobar (30), enfermero, buscan colaboración entre los salteños para concretar su sueño de formarse por unos meses en el exterior para, luego, compartir las experiencias y aprendizajes.
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Belén Miranda (28), trabajadora social, y Diego Escobar (30), enfermero, buscan colaboración entre los salteños para concretar su sueño de formarse por unos meses en el exterior para, luego, compartir las experiencias y aprendizajes.
Ambos transitan el tercer año de la residencia interdisciplinaria en salud mental (Risam), que abarca rotaciones programáticas en centros de salud y en los hospitales Dr. Miguel Ragone, San Bernardo y Materno Infantil.
Los últimos meses del tercer año incluyen una rotación electiva, para la cual pueden elegir un centro sanitario que esté en la provincia, en otra jurisdicción o, incluso, en otro país.
El cuarto año es de devolución y los chicos irán adonde se los necesite en la provincia, para poner en práctica las habilidades y destrezas que desarrollaron a lo largo de su formación.
El sueño de Belén y Diego era hacer la rotación electiva en Trieste (Italia), donde se gestó la reforma en salud mental en los años 70, que sentó las bases de un nuevo paradigma a nivel mundial. Sin embargo, a raíz de la pandemia de COVID-19, no pudieron ir a este país.
En España, en cambio, luego de que mejoró un poco la situación, en junio del año pasado, les aceptaron la solicitud y hacia allí enfocaron su proyecto de formación. Antes, buscaron hospitales en México y Colombia, así como en otros países, pero no todos los dispositivos recibían ambas profesiones.
En Madrid, estarán en una institución que trabaja cuestiones de salud mental con un abordaje interdisciplinario a nivel de la comunidad. Luego, Belén irá a un centro similar en Barcelona.
Si bien los chicos ya tienen los pasajes para el 1 de abril, aún necesitan fondos para cubrir los costos de estadía: alojamiento, transporte y comida. Tienen una beca mínima de la Nación que les da cobertura básica de salud y seguro de vida.
Para juntar fondos, Belén y Diego organizaron un bono solidario, con el fin de solventar algo de los gastos que tendrán en euros en la península ibérica.
Los chicos estiman que necesitan juntar al menos 5 mil dólares cada uno y, como ya gastaron gran parte de lo que tenían para comprar el pasaje, les falta dinero para cubrir la mayoría de los costos de estadía. "No es sencillo. Es mucho dinero para recaudar. A través del bono, queremos solventar algo de los gastos", expresaron.
Quienes quieran ayudarlos pueden comprar el bono solidario: este cuesta $300, se sorteará el 1 de febrero y, por ahora, cuenta con 500 números, con ocho premios: un día de spa, un parlante Bluetooth, un reloj inteligente, auriculares, un cargador portátil, un voucher de ropa marca Philia, una caja navideña y un premio sorpresa.
Para enviarles el dinero del bono o ayudarlos con algo más, el alias para transferencias es "bono.risam". Para comunicarse con ellos, sus números de celular son 387 5220474 y 387 5601262.
"Traer otras experiencias"
Belén y Diego se sorprendieron cuando, tras ingresar a la residencia, conocieron la reforma en salud mental que se originó en Trieste. Desde entonces, tienen curiosidad por conocer cómo es la reforma en otros países.
Reconocieron que en la Argentina "se lograron grandes avances" con la Ley N° 26.657. Ahora, les gustaría conocer las políticas de salud mental de otros países y compararlas con las de acá.
"Esto nos ayuda mucho en nuestra formación. Queremos aprender más, traer otras experiencias y conocimientos y compartirlos. Dar nuestro aporte en Salta o en el NOA para la salud mental", expresó Diego.
Belén dijo que volcarán los aprendizajes y experiencias en la devolución. "Queremos aprovechar al máximo la oportunidad y la formación", agregó.