El 10 de noviembre de 2012 surgió El Mariachi Luz de Luna Salta, que durante una década viene recorriendo los barrios de la ciudad y distintas localidades salteñas. Está conformado por Víctor Suárez (guitarra, voz y animación); Alberto Benítez (guitarra, voz y animación); Luis Vilca (trompeta y voz); Gustavo Suárez (trompeta y voz); y Eduardo Mamaní (guitarra, voz y animación). "Llevamos alegría, sorpresas y buenas vibras. Son muchas las anécdotas y vivencias que atesoramos en nuestros corazones y no podemos dejar de agradecer a nuestros clientes, personas que nos contratan y nos siguen en las redes sociales, y que actualmente más de 17.000" destacó Gustavo Suárez. Puesto a desgranar el porqué son cultores del género, reconoció la influencia de sus padres en sus gustos musicales tempranos.
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El 10 de noviembre de 2012 surgió El Mariachi Luz de Luna Salta, que durante una década viene recorriendo los barrios de la ciudad y distintas localidades salteñas. Está conformado por Víctor Suárez (guitarra, voz y animación); Alberto Benítez (guitarra, voz y animación); Luis Vilca (trompeta y voz); Gustavo Suárez (trompeta y voz); y Eduardo Mamaní (guitarra, voz y animación). "Llevamos alegría, sorpresas y buenas vibras. Son muchas las anécdotas y vivencias que atesoramos en nuestros corazones y no podemos dejar de agradecer a nuestros clientes, personas que nos contratan y nos siguen en las redes sociales, y que actualmente más de 17.000" destacó Gustavo Suárez. Puesto a desgranar el porqué son cultores del género, reconoció la influencia de sus padres en sus gustos musicales tempranos.
"Nuestras madres supieron escuchar canciones como 'La de la mochila azul', interpretada por Pedro Fernández, o 'La Malagueña', que sin lugar a dudas recorrió el mundo y por supuesto cantada y grabada por un sinfín de artistas latinoamericanos", señaló. Sin embargo, a ellos también los atravesó el trabajo de Los Cantores del Alba, a los que recordó acompañados por El Mariachi de Oro. "Fue también de gran trascendencia para nosotros el haber mamado desde muy niños esa fusión de la música mexicana con el folclore nuestro. Eso produjo un acercamiento que nos permitió soñar con abordar el género mariachi", definió. Añadió que solicitan sus servicios personas de la ciudad y de localidades del interior provincial para una multiplicidad de festividades que van desde cumpleaños, aniversarios casamientos y pedidos de mano hasta reconciliaciones de pareja y fiestas patronales. Vistas en centenares de películas, sobre todo en aquellas del Cine de Oro Mexicano, la serenata, aquella música interpretada en la calle y al aire libre durante la noche para festejar a alguien, continúa vigente.
"La recepción siempre es muy buena. Por lo general juega a nuestro favor el factor sorpresa, es decir, quienes nos llevan para agasajar al ser querido la mayoría de las veces lo hacen sin que la persona se entere y entramos con nuestras trompetas, guitarras y voces para brindar alegría y hacerles pasar un lindo momento a las personas que se encuentran en el lugar", comentó Gustavo. Los temas que no deben faltar en el repertorio, añadió, son los boleros y clásicos. También reversionan canciones de otros géneros y las ajustan al estilo mariachi. Invitado a reflexionar en las condiciones de un buen cantor expresó: "El mariachi debe estar dispuesto constantemente a levantar su voz en nombre del amor y de la alegría. Interpreta casi siempre sin equipos que amplifiquen los instrumentos y las voces. Por ello, se debe cantar fuerte y practicar la técnica vocal de manera constante para no desgastar o hacer sufrir el aparato fonador, el cual es nuestra herramienta de trabajo", instruyó. Y se despidió contando que aunque no sustentan sus economías por entero del canto, sino gracias a los réditos de otros trabajos, "más allá de lo redituable es un cable a tierra, un placer y un gusto hacer lo que amamos".
Alma Mexicana
Tiene cinco años de existencia y cinco integrantes: Diego Cardozo (primera trompeta); Luciano Colque (segunda trompeta); Federico Nieva (cantante y primera guitarra); Facundo Tapia (cantante y guitarra); y Carlos Córdova (cantante y guitarra). "Amamos el género, debido a su sonido, a su música, a los instrumentos como las trompetas, los violines, el guitarrón y la vihuela, todos autóctonos de México", indicó Carlos Córdova. Añadió que el contacto habitual con el público les da un profundo reconocimiento de las emociones humanas. "Hemos cantando por tantos lugares y compartido con tantas familias que ya dejaron de ser clientes algunos y pasaron a ser amigos. Somos muy bendecidos y agradecidos por ello al Señor y a la Virgen del Milagro, a quienes nos encomendamos", continuó y el recaudo espiritual es harto comprensible entre quienes salen asiduamente a las rutas, urgidos por cumplir con varios compromisos.
La charla recayó de forma insoslayable en la serenata, a la que Córdova definió como "una intención de tener un detalle distinto para esa persona especial". "Cantamos hacia los balcones muchas veces y vivimos de todo; pero ver los ojos de una madre, de una mujer, de una hija al escucharnos es genial. Poder estar allí y compartir esa alegría es impagable", destacó. En el repertorio, además de los tradicionales del cancionero mariachi, integran temas románticos de Juan Gabriel como "Hasta que te conocí", "Te sigo amando", y "Te lo pido por favor" y también canciones que ha popularizado Luis Miguel como "La Vikina", "La media vuelta" y "Si nos dejan".
"Para ser un mariachi aquí en Salta solo se necesita amor a la música y dedicación como en cualquier oficio. Y disfrutar de momentos increíbles. Ver situaciones que te llenan el alma. Estar en lugares extravagantes y estar en lugares muy humildes, que es donde más nos abrazan con el corazón", cerró.