Durante la mañana y el mediodía del jueves 24, en la ciudad de Salta, reinó la anarquía. El macrocentro capitalino por el lapso de cinco horas estuvo sitiado por distintos cortes y manifestaciones que se produjeron en puntos estratégicos de la ciudad. Durante la mañana de esa jornada, miles de salteños vieron vulnerado su derecho constitucional a transitar libremente.
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Durante la mañana y el mediodía del jueves 24, en la ciudad de Salta, reinó la anarquía. El macrocentro capitalino por el lapso de cinco horas estuvo sitiado por distintos cortes y manifestaciones que se produjeron en puntos estratégicos de la ciudad. Durante la mañana de esa jornada, miles de salteños vieron vulnerado su derecho constitucional a transitar libremente.
El grueso de las protestas se realizaron sobre avenida San Martín, Ituzaingó, Pellegrini, avenida Jujuy y la terminal. Desde muy temprano los manifestantes se agruparon sobre Yrigoyen para marchar hacia el centro de Salta.
Los cortes producidos en la avenida San Martín, una de las principales arterias del centro, generó un caos vehicular y un malestar generalizado ya que se tuvieron que desviar todas las líneas de colectivos. Muchas de ellas se volvían directamente a los barrios sin pasar por el centro.
Cuando los salteños pudieron recuperar la normalidad fue el momento de hacer un balance. Los comerciantes, uno de los sectores más perjudicados de este desorden, denunciaron que durante ese día no hubo gente en el microcentro por lo que las ventas se desplomaron.
Según los empresarios comerciales de la zona afectada, los piquetes afectan el movimiento pero principalmente el humor de la gente. Ambas cosas terminan repercutiendo y perjudicando las ventas, porque "el humor" es sobre todo el impulso que lleva a las personas a comprar.
Bajas ventas
Desde la Cámara de Comercio e Industria comentaron que la situación que se vivió el jueves en la ciudad "evidentemente" sí perjudicó a las ventas porque ese día estuvieron muy flojas a causa de que había poca gente en las calles. "La gente no vino al microcentro", aseguraron.
Desde la entidad manifestaron que ese día, los comerciantes recibieron mensajes como: "por los cortes no vengo al centro", "además de afectar al movimiento, altera el humor de la gente", "la demanda escolar derrama a todos como consuelo".
Aunque no hay datos oficiales de ninguna entidad por el momento, muchos comerciantes que hablaron con El Tribuno expresaron que algunos negocios llegaron hasta perder un 80% de ventas durante esa mañana. Los empresarios afirman que uno de los rubros más perjudicados fue el de las prendas de vestir.
Los comerciantes también denunciaron que con los piquetes que se dieron en el macrocentro y los feriados de carnaval "perdieron" casi toda una semana de ventas, que en un contexto tan complejo por la crisis económica que atraviesa el país afecta directamente a la rentabilidad de sus negocios.
"El viernes por suerte hubo un muy buen movimiento, seguro por la gente que no pudo salir durante toda la semana esperamos que hoy también sea una buena jornada. Obviamente los útiles escolares y los uniformes son los más buscados, pero muchas veces son tentados por otros productos. Hay un efecto rebote", expresaba ayer un comerciante del microcentro.
Los cortes de calle y manifestaciones en el centro de movimientos sociales y piqueteros se han transformado en una costumbre en la ciudad de Salta. Esta situación está produciendo un hartazgo en los comerciantes que denuncian permanentemente que las movilizaciones paralizan las ventas.
Comerciantes piden una reunión con Seguridad
Carol Ramos, representante de Comerciantes Unidos, expresó que el piquete que paralizó la ciudad de Salta para los comerciantes "obviamente fue un golpe directo al estómago" en todos los aspectos.
"Nos bajan mucho las ventas sobre todo las casas de boutique y de venta de ropas porque la gente que pasa no tiene ganas de mirar nada cuando hay un desorden como el del jueves. Uno hace las compras cuando está en relajado no cuando está estresado por un corte de calle o manifestación", expresó Carol Ramos.
Los comerciantes están hartos y cansados de los cortes de calle y las manifestaciones es por eso que esta semana van a presentar una nota pidiendo una audiencia al ministro de Seguridad Marcelo Domínguez para pedirle que les dé una solución definitiva a los problemas de circulación que hay en el centro capitalino y afecta seriamente a sus fuentes laborales.
"Estamos por pedir una audiencia con el ministro de Seguridad aunque yo soy más de ir por el lado de una mediación porque no están garantizando un derecho constitucional que es el libre tránsito. ¿Quién nos lo tiene que garantizar? Eso queremos discutir porque nos están prohibiendo un derecho constitucional. Las personas que viven de su trabajo el tiempo vale oro. En nuestro caso o trabajamos o nos fundimos", expresó la representante de los comerciales.
Carol Ramos detalló que el jueves 23 cuando se produjo ese piquete masivo en la ciudad de Salta prácticamente no trabajaron porque no había gente en las calles debido al caos que se había desatado. Es más, la referente de los comerciantes remarcó que cada vez que hay un piquete en el centro no pueden trabajar.
"Los comerciantes están enfermos de la bronca. Solo quejas hacia la gente que hace los cortes hay en los grupos de WhatsApp que compartimos los empresarios comerciales. A nosotros nos perjudican como ciudadanos y comerciantes", destacó.
"Sentimos mucha defraudación que hay gente a la que le pagan para ir a cortar las calles y no entendemos cómo los gobernantes pueden permitir esta situación. Están perjudicando a los trabajadores, les están haciendo un daño. Están cometiendo un perjuicio, es algo que no reconoce nadie, ¿quién se hace cargo de eso? Nadie", finalizó.